Armengol remodela el Govern para dar un nuevo “impulso” político
La presidenta balear, Francina Armengol, dio ayer un golpe de timón al aprobar una remodelación del Govern que refuerza el poder del PSOE en el tripartito. Los cambios solo afectan a consellers socialistas y la presidenta los justificó en la necesidad de dar una nuevo “impulso” al Ejecutivo en medio de la pandemia.
Armengol crea una nueva Conselleria de Fons Europeus, que se encargará de la gestión de todas las ayudas que lleguen para hacer frente a la covid. Su titular será el menorquín Miquel Company, que dejará la vicepresidencia del Consell de Mallorca. La presidenta del PSOE de Mallorca, Mercedes Garrido, será la nueva consellera de Presidència, departamento que asume las competencias de Funció Pública i Emergències. Deja el cargo Pilar Costa, una de las personas de la máxima confianza de Armengol, que será portavoz en el Parlament. Josep Marí, hasta ahora alcalde de Sant Josep (Eivissa), será el nuevo conseller de Mobilitat i Habitatge en lugar de Marc Pons, a quien se coloca en el Ministerio para la Transición Ecológica. Administracions Públiques desaparece, pero su titular, Isabel Castro, seguirá en el Govern. Armengol refuerza, además, el poder de su mano derecha en el Ejecutivo, el conseller de
Model Econòmic i Turisme, Iago Negueruela, que asume las funciones de portavoz.
Los cambios llegan en medio de un cierto desgaste político de Armengol, con críticas internas de sus socios en el Govern. Podemos ha anunciado su disposición a apoyar la petición de Cs para crear una comisión de investigación que dictamine si ha habido irregularidades en la vacunación de altos cargos del Servei de Salut. Més, por su parte, ha promovido una iniciativa para que el Parlament inste a presentar un recurso de inconstitucionalidad contra los presupuestos generales del Estado. La propuesta saldrá adelante el martes en el Parlament con el apoyo de Més, Més per
Menorca y el resto de la oposición.
A las tensiones internas se suma, además, una creciente presión externa por parte del sector de la hostelería y del turismo para flexibilizar las restricciones y tratar de buscar una solución que permita recuperar la actividad. La hostelería ya ha promovido tres manifestaciones en Palma con la presencia de hasta 4.000 manifestantes, mientras que el sector turístico presentó ayer el movimiento SOS Turismo, que se visualizó en centenares de pancartas con este lema colgadas en las fachadas de hoteles cerrados por la pandemia. El sector turístico pide una campaña de vacunación masiva y un plan de rescate con ayudas directas.