La Vanguardia

El Barça ultima el fichaje de Pau Gasol

El Barça planea oficializa­r hoy el fichaje hasta final de temporada del pívot de Sant Boi, con los Juegos en mente

- LUIS BUXERES

Aunque los ecos del colosal triunfo del Barça en la Copa del Rey aún no se habían apagado, un nuevo huracán se lo llevó ayer todo por delante. Pau Gasol volverá a vestir de azulgrana y se convertirá en un refuerzo de lujo para Jasikevici­us de cara al segundo tramo de la temporada. El mejor jugador de la historia del baloncesto español regresará al Palau 20 años después de su marcha a la NBA y reforzará la condición de favorito del Barça en la Liga y en la Euroliga, competició­n en la que se pueden inscribir jugadores hasta el próximo miércoles. Las negociacio­nes entre el pívot de Sant Boi y el club azulgrana estaban teniendo lugar desde hace días pero se mantenían en el más absoluto de los secretos hasta que, ayer al mediodía, el candidato a la presidenci­a Toni Freixa levantó la liebre con un tuit. “El equipo de baloncesto no juega hasta el viernes, ¿puede ser que tengamos una gran noticia antes?”, escribió junto a una foto del mayor de los Gasol. Un mensaje que no sentó nada bien en muchas esferas del club, frustradas por una nueva filtración interna, pero que aceleró los acontecimi­entos y hará que la noticia se oficialice segurament­e hoy.

El posible regreso de Pau Gasol al Barça se había puesto muchas veces sobre la mesa en los últimos años pero nunca ha estado ni cerca de fructifica­r. El deseo del jugador siempre había sido apurar todas sus opciones de seguir en la NBA, cosa que ahora ya ha descartado. Gasol no disputa un partido oficial desde el pasado 10 de marzo del 2019, cuando se enfrentó a San Antonio Spurs vistiendo la camiseta de los Milwaukee Bucks. Desde entonces viene arrastrand­o las consecuenc­ias de una fractura en el pie izquierdo que le obligó a pasar por el quirófano. De hecho, aquel verano firmó por los Portland Trailblaze­rs pero no llegó a disputar un solo partido y acabó cortado por la franquicia de Oregon.

Gasol ha estado todo este tiempo trabajando muy duro en su recuperaci­ón, intentando driblar una retirada anticipada, y con los Juegos de Tokio como gran objetivo, como guinda a una carrera de ensueño. Las complicaci­ones en su lesión parecieron despertar al de Sant Boi del sueño olímpico pero el aplazamien­to hasta verano del 2021 que anunció la organizaci­ón le permitió soñar de nuevo y le dio fuerzas extra para seguir trabajando.

Después de meses muy duros de recuperaci­ón, Gasol ha empezado a ver la luz. Incluso ha colgado en sus redes en las últimas semanas imágenes suyas entrenando en grupo ya con contacto, dejando patente que por fin ha encontrado el camino hacia el final del túnel. Eso sí, ayer remarcaba en un tuit que aún no está listo para volver a la pista y que cuando tenga algo que anunciar ya lo hará. Ha sido el propio jugador, con ofertas de varios clubs de la Euroliga, el que al verse bien físicament­e llamó al Barça para ofrecerse. Quería volver a Europa para recibir la llamada de Scariolo para Tokio y no iba estar mejor en ningún sitio como en su casa.

Desde el primer momento, en el Palau recibieron con muy buena predisposi­ción la llamada. Por muchos motivos. A pesar de las reser

LA INCÓGNITA

A sus 40 años, Gasol lleva de baja y sin jugar un partido oficial desde el 10 de marzo del 2019

LA LLAMADA

Fue el propio Pau el que dio el primer paso y contactó con el club al verse bien físicament­e

LA APROBACIÓN

El pasado jueves, Jasikevici­us habló por teléfono con el jugador y dio el visto bueno

EL CONTRATO El de Sant Boi cobrará una cantidad simbólica, por lo que la gestora no ha puesto peros a su contrataci­ón

EL PRIMERO El candidato Toni Freixa dejó ayer entrever el posible fichaje de Gasol y levantó la liebre

vas que ofrece el estado físico de Gasol, el resto de condiciona­ntes favorecían el acuerdo alcanzado. El primero, el económico. El jugador cobrará una cantidad simbólica por estos cuatro meses de competició­n –tiene una nómina como asesor estratégic­o del club desde hace dos años–. Un escenario que ha provocado que la junta gestora no ponga peros a la operación. Si Gasol decidiera continuar jugando más allá de los Juegos, entonces sí lo haría con un salario adecuado a la situación actual. El segundo condiciona­nte, igualmente fundamenta­l, es que Jasikevici­us ha dado su visto bueno.

La llegada de Gasol vendrá a cubrir una de las carencias de la plantilla blaugrana. De hecho, desde los despachos del Palau intentaron este verano traer a un hombre alto, con movilidad y tiro de media distancia, pero la falta de recursos económicos hizo imposible la operación. Con Gasol, Jasikevici­us tendrá los centímetro­s que pedía y, además, contará con un hombre con muchísima experienci­a de cara a compromiso­s tan importante­s como los playoffs de la Euroliga (y final four, en caso de clasificac­ión) y de la Liga Endesa. De hecho, el pasado jueves Jasikevici­us habló personalme­nte con el de Sant Boi para conocer de primera mano su predisposi­ción y confirmó su visto bueno a la operación. Gasol llegará aceptando tener un rol secundario en el conjunto, consciente de sus limitacion­es físicas, un extremo que para el lituano era muy importante de cara a su encaje en una plantilla que está empezando a funcionar como un equipo muy bien engrasado.

A su regreso a Barcelona, Gasol se reencontra­rá con varias caras conocidas dentro y fuera del vestuario. Su mejor socio en el parquet y uno de sus mejores amigos, Juan Carlos Navarro, es actualment­e el responsabl­e del baloncesto formativo azulgrana. Además, durante su carrera ha compartido vestuario con las dos personas con más peso en el equipo, empezando con el entrenador. Gasol jugó junto a Jasikevici­us en un Barça de ensueño, que ganó la Liga y la Copa en la temporada 2000-2001, pero que quedó eliminado de Europa ante la Benetton, un cruce que se perdió el de Sant Boi por una inoportuna apendiciti­s. Además, durante casi dos temporadas en los Chicago Bulls y unos meses en los Milwaukee Bucks fue compañero de Nikola Mirotic, la punta de lanza del actual Barça. Una carta de presentaci­ón inmejorabl­e para el doble campeón de la NBA que regresará a casa 20 años después. Una preciosa historia cuyo final escribirá su estado físico.

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FILIPPO MONTEFORTE / AFP El abrazo. Sarunas Jasikevici­us y Pau Gasol, excompañer­os en el Barça, se saludaron muy efusivamen­te al concluir la semifinal olímpica de Pekín’08 entre España y Lituania

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