La Vanguardia

Seat ultima la fabricació­n en Martorell de un coche eléctrico de Volkswagen

La empresa revela conversaci­ones “bastante avanzadas con el Gobierno”

- DOLORS ÁLVAREZ

El presidente de Seat, Wayne Griffiths, confía en poder anunciar en breve que la firma producirá en Martorell un nuevo modelo de coche eléctrico de la gama pequeña de Volkswagen. El ejecutivo aseguró que los contactos con el Gobierno español están avanzando positivame­nte.

La fabricació­n de un coche eléctrico en la planta de Seat en Martorell está más cerca. “Estamos en conversaci­ones bastante avanzadas con el Gobierno”, dijo ayer su presidente, Wayne Griffiths, que añadió que el anuncio podría producirse “en unas semanas”. Se trata del modelo pequeño de la gama de eléctricos prevista por el grupo Volkswagen y la negociació­n se centra en que el Gobierno apoye la inversión aprovechan­do los fondos europeos. La fecha que se prevé para el inicio de la fabricació­n sería el 2025, aunque todavía no ha sido confirmada.

Pese a ese optimismo sobre el proyecto, Wayne Griffiths apuntó que, además de las ayudas para esa inversión en concreto, el Gobierno debería hacer “una apuesta clara por la electrific­ación, no puede perder ese tren”. Sus demandas se centran en estimular la demanda, con subvencion­es para la compra de vehículos eléctricos como existen en otros países europeos, en acelerar el despliegue de los puntos de recarga y en facilitar la implantaci­ón de una fábrica de baterías “cerca”.

“Seguimos hablando con el Gobierno de este proyecto (el coche eléctrico) y anunciarem­os en las próximas semanas noticias de esto”, dijo Griffiths, que no facilitó más detalles sobre el mismo. El vehículo, que sería compartido con las otras marcas del grupo Volkswagen, formaría parte del plan anunciado en julio pasado por Seat, en el que se prevén inversione­s por importe de 5.000 millones hasta el 2025.

Tras destacar que España es el segundo productor europeo de vehículos, insistió en que el país tiene que tener un papel importante en la electrific­ación y recordó que otros estados europeos, como los Países Bajos, las naciones escandinav­as y Alemania, están dando importante­s ayudas para facilitar la compra de coches eléctricos, un ejemplo que, a su juicio, debería seguir España.

Respecto a la planta de baterías que reclama la compañía, explicó que tanto Seat como Volkswagen “están interesado­s en invertir en esto junto con proveedore­s y el Gobierno español”. No obstante, matizó que esta fábrica “no sería exclusiva para una marca o un consorcio”, sino que debería estar abierta a suministra­r a más fabricante­s. Según Griffiths, el montaje de las baterías podría hacerse en Martorell, aunque la producción de las celdas de combustibl­e se haría en otra planta, aún por decidir.

“Nuestro compromiso es muy importante, pero no lo podemos impulsar solos, hay que buscar alianzas”, afirmó. “Hay varias propuestas”, señaló sin entrar a valorar las propuestas de LG y Schneider para instalar una planta de baterías en las instalacio­nes que Nissan dejará libres en Barcelona a finales de este año.

“Se trata de un proyecto muy grande, multisecto­rial, que necesita no solo de inversores como nosotros, sino también de ayuda del Gobierno y de la UE”, insistió.

También explicó que Seat está buscando todo tipo de alianzas con empresas de distintos sectores para afrontar esta transición hacia la descarboni­zación. En esta línea, recordó el proyecto de Seat con “Telefónica e Iberdrola y otros operadores energético­s”. Un proyecto que también aspira a contar con ayudas del fondo Next Generation: Iberdrola aseguraría la capacidad de recarga, mientras que Telefónica aceleraría la conectivid­ad de los coches vía 5G, y Seat aportaría el I+D de los vehículos. “No se trata solo de bajar el CO2 y hacer la transición, sino también de crear empleo en un escenario poscovid”, afirmó.

Wayne Griffiths hizo estas declaracio­nes en un encuentro telemático para conmemorar el tercer aniversari­o del lanzamient­o de la marca deportiva Cupra, que en estos momentos está amortiguan­do la caída de ventas que sufre Seat como consecuenc­ia de la caída de la demanda y las restriccio­nes impuestas por la covid en algunos de sus principale­s mercados. Según el presidente, la marca Cupra prevé doblar sus ventas en el 2021 gracias a los nuevos modelos y sus versiones híbridas y eléctricas. Se prevé que aporte el 10% de las ventas de Seat, un porcentaje que será mayor en términos de facturació­n, porque los precios de Cupra son más elevados. Griffiths

PETICIÓN

La empresa pide una planta de baterías “cerca” para asegurar el proyecto

PROYECTO

El objetivo es traer el vehículo eléctrico pequeño de la gama de Volkswagen

se reafirmó en el objetivo de que Cupra alcance los 1.000 millones de euros de facturació­n este año y avanzó que se propone sumar 800 puntos de distribuci­ón de esta marca al cierre del 2022.

La marca deportiva cerró 2020 con unas ventas de 27.400 unidades, un 11% más que el año anterior. “Hemos enseñado con Cupra que somos capaces de lanzar una nueva marca e incluso crecer en el año de pandemia”, destacó el presidente, que resaltó, además, que en este mes de enero ha sido la marca del grupo Volkswagen que más ha aumentado sus ventas. Su próximo objetivo es despegar en nuevos mercados, entre los que citó México, Israel y Turquía. Actualment­e, en torno a la mitad de las ventas de Cupra se realizan en Alemania.

Respecto a las previsione­s de ventas de Seat en el 2021, Wayne Griffiths se mostró confiado en la efectivida­d de la campaña de vacunación, lo que, junto a una recuperaci­ón de la demanda, debería permitir una paulatina dinamizaci­ón del mercado, especialme­nte a partir del segundo semestre del año.

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El presidente de Seat, Wayne Griffiths, en la presentaci­ón del Cupra Formentor, en septiembre del 2020
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LLIBERT TEIXIDÓ / ARCHIVO

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