Woody Allen carga contra el documental que lo ataca
Allen v. Farrow debería haberse titulado al revés, pues siempre fue la actriz quien atacó al director neoyorquino. También ahora en el documental de HBO, de cuatro episodios, que vuelve sobre las acusaciones de las que resultó exonerado en 1993: el relato de Dylan, hija adoptiva de Mia Farrow y Woody Allen, que señaló al director como posible abusador sexual. Un análisis clínico no encontró nada consistente, pero el movimiento #Metoo resucitó el escándalo y Allen (85) cayó en desgracia. Ahora le resulta imposible rodar en EE.UU. y esta serie puede ser la losa que sepulte para siempre su carrera.
El documental de HBO, rodado en secreto durante tres años, reconstruye el escándalo y testimonios como los de Mia Farrow y sus hijos Dylan y Ronan, y las amigas Carly Simon y Casey Pascal coinciden en que la relación del cineasta con la entonces niña de 7 años era “muy intensa”. Dylan asegura que dormían juntos en ropa interior y Mia Farrow, que recuerda encontrarse en ocasiones a Allen arrodillado frente a la cría con la cabeza en su regazo, atestigua que llegó sentirse como si fuese policía. “¿Si entro y veo algo que no debería estar pasando?”. Allen ha denunciado en un comunicado que el documental está repleto de falsedades y que Dylan fue entrenada para testificar contra él cuando era una niña. “No es sorprendente que la cadena que ofrezca esto sea HBO, que tiene un contrato de producción permanente con Ronan Farrow”, añade el director.