La Vanguardia

La salida de familias fuera de Barcelona afecta a la preinscrip­ción de P-3

- CARINA FARRERAS

Las escuelas de Barcelona irán más desahogada­s en el curso 2021-2022 que empezará en septiembre, con una caída de alumnos respecto al curso actual, según las previsione­s del Consorci d’educació de Barcelona, cuyos responsabl­es presentaro­n ayer la programaci­ón de la oferta inicial de plazas de cara a las próximas preinscrip­ciones. Las cifras están marcadas por la caída demográfic­a, el freno de la inmigració­n y la salida de familias jóvenes barcelones­as a otros municipios. El teniente de alcalde Joan Subirats, vicepresid­ente del Consorci, indicó que hasta que no se conozcan los datos de la preinscrip­ción escolar en toda Catalunya y las opciones de las familias, no se sabrá cuántos son en su conjunto y adónde han ido a vivir.

De momento, el Consorci solo tiene los datos de los dos cursos que inician etapa, P-3 y 1.ºESO, y en ambos se registran caídas importante­s. En P-3, con un total de 11.751 niños habrá 870 alumnos menos, que suman a la pérdida de 400 registrada el curso anterior. De hecho, esta previsión de plazas se realiza según el padrón municipal que en estos últimos años ya ha registrado descensos acumulados, por descenso de natalidad y traslados domiciliar­ios fuera del municipio. En cuanto a la ESO, los alumnos de 6.ª de primaria que pasarán a primero de secundaria serán 14.565, 812 menos que en el curso 2020-2021. Además de la demografía, la ausencia de nuevos alumnos inmigrante­s también explica este descenso.

En el curso 2019-2020 se produjeron 5.850 matriculac­iones fuera del periodo ordinario, en todas las etapas educativas, debido, mayormente, a la llegada de alumnado extranjero en verano o durante el curso. En este periodo se incluye los meses del primer confinamie­nto. En el 2020-2021, con la movilidad entre países aún restringid­a, esta matrícula viva es todavía inferior, de 3.474 plazas menos, una caída del 44% sobre un curso ya mermado. Respecto al próximo, es una incógnita el flujo inmigrator­io de los siguientes meses.

El presidente del Consorci, Josep Gonzàlez-cambrany, manifestó que el descenso de alumnos en las aulas no va a repercutir en el cierre de líneas en la escuela pública, que mantiene su oferta actual y aumenta en un nuevo instituto y tres centros adquiridos a la escuela concertada. A cambio, el descenso permitirá bajar ratios de alumnos por clase. Así, en zonas con elevado porcentaje de estudiante­s vulnerable­s desde el punto de vista socioeconó­mico, las clases de primaria serán de 20 a 22 alumnos y no aceptarán matrícula nueva una vez iniciado el curso. En zonas con poca población infantil, la ratio se situará entre 22 y 24 alumnos. El resto se mantendrá a 25.

En la etapa de secundaria, los alumnos se distribuir­án en un total de 20,9 centros, de los que 75 son públicos y 134 concertado­s. Las ratios oscilarán entre 27 y 30 alumnos, el tope actual máximo.

Estas medidas no afectan a la escuela concertada. Las ratios legales seguirán siendo las mismas y no se evaluará el cierre de grupos hasta conocer las opciones de los padres. La preinscrip­ción escolar podrá realizarse entre los días 15 y 24 de marzo para el alumnado de segundo ciclo de infantil y primaria , y entre el 17 y el 24 de marzo para el de secundaria.

Las previsione­s de la Administra­ción es que haya 870 escolares de 3 años menos y 812 de primero de secundaria

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