La Vanguardia

“El carnet internacio­nal de vacunación salvaría la hostelería”

Tengo 46 años. Me siento orgullosa y feliz de ser de Lloret de Mar (como mis antepasado­s hace 600 años). Farmacéuti­ca y empresaria hotelera. Comparto vida con Andrés y sumamos cinco hijos. ¿Política? Ayuda social. ¿Religión? Valores cristianos, solidarid

- LLIBERT TEIXIDÓ

Cuántos hoteles gestiona? Seis hoteles, entre Lloret, Barcelona, La Molina... ¿Cuántas habitacion­es en el mercado, en total? Más de 1.000 habitacion­es, podemos atender a más de 2.500 personas. Como la población entera de Cadaqués…

¿Con cuántos empleados?

En temporada alta, en el año 2019, éramos un equipo de 350 personas.

¿En ERTE, ahora?

Sí, el 96% del total. Hablamos a menudo por teléfono.

¿Qué les dice?

Me intereso por cómo están, ellos y sus familiares. ¡Son mi familia! Intento cuidarlos, no habría hecho nada sin su ayuda.

¿Los conoce a todos?

¡Claro! Por sus nombres. Me dicen “contigo hasta el final”, es emocionant­e. Lo peor es la incertidum­bre, pero yo les aseguro que juntos saldremos adelante.

¿Desde cuándo se dedica a la hostelería?

En el 2014, pasé de ser responsabl­e de cinco personas en mi farmacia a serlo de 500 personas... de un día para otro.

¿Era farmacéuti­ca, dice?

Por tradición familiar, sí. La familia Cabañas es una de las más antiguas de Lloret, con médicos, farmacéuti­cos...

¿Y qué la convirtió en hostelera?

Murió Climent Guitart, mi marido, propietari­o de Guitart Hotels. Tuve que ponerme al frente. Los que no me conocían pensaron que lo perderíamo­s todo…

Y no, ¿no?

Trabajé muy duro y tuve la suerte de tener a grandes amigos y consejeros a mi lado.

Complicado, imagino.

Si, pero gracias a mi equipo, ha sido posible. Se nos han cruzado muchos obstáculos y los hemos superado uno tras otro.

¡Y solo les faltaba la pandemia!

El verano nos di un respiro. Y luego volvimos a caer en el pozo. Es como el juego de la oca: ¡otra vez a la casilla de salida!

¿Cómo está el panorama ahora?

Las pérdidas del sector son brutales, multimillo­narias, del 80% de la facturació­n. Y un hotel cerrado sigue costando dinero en tasas, impuestos, mantenimie­nto...

Un hotel cerrado es inquietant­e.

El resplandor. Sí, sí. Da miedo.

Afirma que saldrán adelante: ¿cómo?

Sí, saldremos adelante con la capacidad del sector... y pidiendo a los políticos ayudas económicas directas. Y algo importante...

¿Qué cosa?

Una vez vacunados los mayores y sanitarios... ¡hay que vacunar a los trabajador­es del sector hotelero y la restauraci­ón!

¿Como motor económico y social?

Somos el segundo país más visitado del mundo: ¿renunciare­mos en esta crisis a estos ingresos? ¡Un hotel tiene que ser un lugar seguro! Y explicarlo en el extranjero

¿Y si empiezan a llegarnos extranjero­s con sus nuevos virus?

Para evitarlo hay que implantar ¡ya! un carnet de vacunacion­es internacio­nal. Necesitamo­s que vengan con seguridad a disfrutar.

¿Se les ocurre alguna medida más?

Sí: un seguro covid para cada viajero. Si enferma, le cubriría cuidados hospitalar­ios y repatriaci­ón medicaliza­da.

Son ideas dignas de ser valoradas.

Todo el sector hotelero las reclamamos.

¿Van juntos, se ayudan entre ustedes?

Sabemos que sin solidarida­d empresaria­l, sin ayuda mutua, difícilmen­te saldremos de esta comprometi­da situación.

¿Cómo ve la Semana Santa?

¡Ay! Yo miro de cara al verano. Aún me entristece el cierre súbito de diciembre, de un día para otro: tenía un 70% de reservas en La Molina... y tenía los congelador­es llenos con las langostas y lubinas para Nochevieja.

¿Ve luz estival al final del túnel, pues?

¡Sí! Dependerá del porcentaje de población vacunada. ¡La gente necesita vacaciones! Y la hostelería es la industria de la felicidad.

¿Qué rasgos distinguir­án el negocio hotelero del futuro?

Para mí, la aplicación de las cuatro eses.

¿Cuáles son?

S de salud. S de seguridad. S de singularid­ad. S de sostenibil­idad. Y yo creo, además, en las cinco erres.

A saber...

Resistir. Recuperar. Renacer. Refinancia­r. Y resilienci­a, es decir, crecerse ante la adversidad.

Con tantos hoteles, habrá vivido muchas anécdotas.

Julio Iglesias me llamaba “Miranda de Lloret”... Me pidió un cinturón blanco para actuar en Cap Roig. Busqué... y lo encontré en una tienda de souvenirs. ¡Y lo lució! Ah, conocí también a Luz Casal, ¡y es hoy una de mis grandes amigas! Igual que Pilarín.

¿La ilustrador­a?

Sí, ella es ya parte de mi familia. Hemos colaborado en cinco cuentos ilustrados, como La maleta viatgera, escrito para que mis hijos Cristina, Francesc y Albert conozcan los fascinante­s 66 años de vida de Guitart Hotels.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain