Dieta y estreñimiento
Los hábitos alimenticios y la falta de ejercicio están detrás de la mayor parte de los casos de estreñimiento, un síntoma que afecta a cerca del 20% de la población española y que aumenta su prevalencia en las zonas urbanas, entre las mujeres y las personas mayores de 65 años.
Según la Federación Española del Aparato Digestivo, en las sociedades occidentales, los límites normales de la frecuencia de deposiciones oscilan entre tres deposiciones/día como máximo y tres semanales como mínimo, y se considera estreñimiento una frecuencia semanal inferior a tres para ambos sexos (componente objetivo). La mitad de la población que se autoconsidera estreñida expresa, además, la necesidad de un esfuerzo defecatorio excesivo y que sus heces son duras y de escaso volumen (componente subjetivo).
Por otro lado, generalmente, si el estreñimiento dura más de tres meses, se habla de «crónico», «habitual» o «mantenido», y si es puntual, de «ocasional». Desde la Federación recuerdan que en ningún caso debe recurrirse a la automedicación para tratarlo, y que es necesario consultar con un profesional sanitario, que recogerá los datos necesarios para su tratamiento y procurará descartar la posibilidad de padecer algunas de las enfermedades asociadas a esta sintomatología.
PRINCIPALES FACTORES DE RIESGO
La aparición del estreñimiento está relacionada con varios factores, entre los que destacan:
• Una dieta inadecuada, pobre en fibra. • El sedentarismo o la inmovilidad.
• El sobrepeso o la obesidad.
• Demorar o ignorar la necesidad de ir al baño.
Además, se da frecuentemente durante el embarazo y puede estar causado por la toma de ciertos medicamentos, que pueden causar el retardo del movimiento de los alimentos en el intestino.
Una alimentación inadecuada y la falta de actividad física pueden desencadenar los síntomas