La CIBA, un año en tiempo de pandemia
Hace ahora un año inaugurábamos en Santa Coloma de Gramenet La CIBA, espacio de recursos para mujeres, innovación y economía feminista. Una inauguración marcada por la ilusión compartida con las mujeres de la ciudad, una puesta en funcionamiento con una pluralidad de actos y voces, donde la ciudadanía y los grupos de mujeres fueron protagonistas.
Celebramos su primer año de vida con una pandemia todavía no superada.
El 4 de marzo del 2020 hacíamos realidad un sueño. La CIBA encarnaba aquella “cámara propia” que acuñó Virginia Woolf y que tan necesaria es para las mujeres, todavía hoy en día, para poder alcanzar juntas los objetivos emancipatorios que siempre ha defendido el feminismo: derechos, autonomía, educación, trabajo digno, reconocimiento y respeto.
Queremos resaltar que La CIBA es un equipamiento de proximidad que también tiene vocación internacional. De acuerdo con este doble prisma este primer año ha sido un reto poder trabajar para combatir el aislamiento que la pandemia ha significado para muchas mujeres de nuestra ciudad. Somos un servicio esencial, especializado en detección de violencia machista, que ha estado también en los barrios con las agentes lilas.
En este primer año, la crisis de la covid ha transformado la manera de encontrarnos y comunicarnos, y nos ha empujado a una carrera hacia la digitalización. Desde La CIBA queremos liderar proyectos que nos permitan revertir la brecha digital y generar oportunidades ocupacionales para las mujeres. Queremos aprovechar al máximo las nuevas tecnologías para llegar a más mujeres y amplificar las redes relacionales. Las TIC nos han abierto una ventana en el mundo, nos han dado a conocer en otras ciudades, países y continentes. Hoy somos más mujeres conectadas, tenemos más red y nos sentimos más fuertes y al mismo tiempo claramente interpeladas en la defensa de nuestros derechos ante el preocupante retroceso al cual asistimos.
Esta rápida adaptación al nuevo contexto de digitalización exprés ha permitido también salir adelante con los objetivos marcados. Entre otros, el de ser un espacio de reflexión y movilización, con capacidad de influencia en su entorno más próximo y al mismo tiempo un espacio de referencia en una dimensión supra ocal; que actúa desde el ámbito local, pero que tiene una vocación y una proyección globales.
El 5 y 6 de marzo del 2021 ha tenido lugar en nuestra ciudad el seminario “Hacia un activismo Global por la abolición de la prostitución”. Coliderado por varias organizaciones de cariz nacional e internacional nos tiene que permitir poder avanzar en el diseño de políticas públicas que contribuyan al fin de una de las violencias machistas más cruel y también más antigua: la explotación sexual de mujeres, niños y niñas. Queremos tener recursos públicos para las víctimas y reclamar en el gobierno del estado una ley que penalice el consumo de prostitución y apoye a las mujeres víctimas de esta lacra.
Este mes de marzo inauguramos también el Campus CIBA y la Escuela Abolicionista Internacional. Dos proyectos de gran alcance que trabajan en la línea de este doble objetivo: pensar global y actuar localmente.
La CIBA es una nueva propuesta sólida para la acción, un nuevo modelo de formación y aprendizaje para superar las desigualdades, de lucha contra la resignación, contra la violencia y contra la pobreza de las mujeres. Este es un proyecto para hacer posible un feminismo para el 100% de la población desde las políticas públicas. Os esperamos.
Queremos liderar proyectos para revertir la brecha digital y generar oportunidades para las mujeres