Illa explorará alternativas si Aragonès vuelve a fallar
El líder socialista solo excluye a Vox de futuros contactos
La falta de acuerdo independentista para investir a Pere Aragonès, que salvo sorpresa hará fracasar de nuevo la segunda votación de investidura del próximo martes, abre una ventana de oportunidad para otras opciones. Al menos así lo entiende el candidato del PSC, Salvador Illa, que ayer desde Girona insistió en que “hay alternativa”.
El exministro de Sanidad ya manifestó la semana pasada su voluntad de presentarse a la investidura a la presidenta del Parlament, Laura Borràs, aunque esta entendió que aunque Illa había ganado Aragonès tenía más apoyos. “Pero si esto no sale adelante estudiaremos la situación, estoy permanentemente a disposición para construir y liderar una alternativa”, planteó ayer un Illa que lamentó los “problemas reales y concretos” que siguen sufriendo los ciudadanos de Catalunya “en un momento de especial dificultad” y mientras “hay ausencia de Govern seis semanas después de las elecciones”.
De hecho, para escenificarlo, el líder socialista se desplazó hasta los barrios gerundenses de Font de la Pòlvora y Vila-roja, donde “se constatan” necesidades “reales” como la limpieza y el suministro eléctrico.
“Quiero trasladar que Catalunya saldrá adelante, que hay alternativa para no tener que repetir un fracaso”, defendió Illa, que afeó que los “últimos diez años” de gobiernos convergentes y republicanos “han provocado decadencia, han empobrecido Catalunya y han desprestigiado las instituciones”. “Y el viernes se intentó repetir una fórmula que ya ha fracasado”, siguió, advirtiendo que la propuesta verbalizada por Aragonès “no ofrece solidez”.
Ante ello, el exministro de Sanidad aseguró que se arremangará para buscar los apoyos necesarios, aunque el hecho de que solo En Comú Podem haya expresado su predisposición le augura poco recorrido ya que se quedan en 41 escaños, menos aún de los obtenidos por la suma ERC y CUP (42). Sin embargo, Illa sostuvo que está dispuesto a mantener conversaciones con todos los grupos del arco parlamentario catalán.
Todos a excepción de Vox, eso sí. “Cumpliré con lo que dije, no apoyaré la estabilidad de un Govern que lidere en la ultraderecha”, garantizó. Los socialistas catalanes forman parte del pacto sellado junto a ERC, Junts, CUP y comunes para aislar a Vox con un cordón sanitario en el Parlament.
La empresa de Illa es compleja, pero se resiste a resignarse mientras sigan las discrepancias independentistas. Y es que desde el viernes ya corre el reloj hacia el 26 de mayo, límite para una investidura antes de la repetición electoral. El candidato, hoy, sigue siendo Aragonès, pero Illa se presenta como la alternativa.
El exministro lamenta que aún no haya nuevo Govern seis semanas después de las elecciones del 14-F