El juicio por la muerte de Floyd entra en su fase crucial bajo suspicacias
La vista oral contra el policía Chauvin, nuevo termómetro racial en EE.UU.
Muchos negros de Minneapolis expresan poca confianza en que el veredicto sea “culpable”.
Dicen que ya han visto muchas veces esta misma película, en la que el policía blanco se va de rositas y el negro, además de criar malvas, sale aún peor parado, volver a morir después de muerto.
Este lunes entra en la fase clave el juicio contra el agente Derek Chauvin, blanco de 44 años. Su rodilla presionó más de nueve minutos el cuello del negro George Floyd –“no puedo respirar”, suplicó– el pasado 25 de mayo, en un cruce de la ciudad de Minnesota y a la vista pública por un vídeo grabado por un transeúnte. Esa imagen corrió por el mundo.
La Fiscalía y la defensa plantearán sus argumentos en una vista oral retransmitida, tras concluir la selección del jurado. La fase de testimonios arranca bajo suspicacias por la aparición de una prueba más que sorprendente, según subrayó Paul Butler, profesor de Derecho en la Universidad de Georgetown.
La policía registró en agosto el coche de Floyd y el de la patrulla en el que lo trasladaron sin hallar sustancia alguna. Eric Nelson, principal letrado de Chauvin, requirió en diciembre su repetición. Esta vez encontraron restos de metanfetamina y de fentanilo en el primer vehículo y rastros de droga en el segundo, con el ADN de Floyd.
Ninguna explicación por esa diferencia en los resultados cuando idénticos expertos policiales revisaron los dos coches en el margen de unos meses, y tras la petición del abogado del acusado, precisamente un policía. Este hallazgo sorpresa ha resultado determinante para que el juez Peter Cahill, que dirige el juicio, aceptara una prueba que antes descartó y que puede ser crucial.
El magistrado había negado que la defensa aludiera y presentara el vídeo de una detención de Floyd en el 2019, porque podía crear prejuicios contra la víctima con algo que no guardaba relación con la inocencia o culpabilidad de Chauvin.
Entonces también lo sacaron del coche a punta de pistola. A pesar de la tensión y la resistencia, Floyd entró en el vehículo de la patrulla. Ahí les dijo que se había tomado ocho pastillas de un analgésico opioide. Una ambulancia lo trasladó al hospital. Le diagnosticaron una alta presión sanguínea y una situación de estar al borde de un ataque cardiaco. El cambio de postura del juez es un éxito de la defensa.
El letrado Nelson argumenta que en mayo del 2020 se repitió esa pauta. Que Floyd ingirió sustancias y que su defunción no tuvo nada que ver con la rodilla de Chauvin. Su muerte la atribuye a una sobredosis combinada con un historial de problemas vasculares y a la covid.
Esa es la clave: ¿qué es lo que exactamente causó la muerte? La autopsia determinó que Floyd, de 46 años, falleció por un fallo de corazón provocado por “la presión ejercida en su cuello” y lo calificó de “homicidio”. El patólogo Andrew Baker añadió que la arteriosclerosis, la hipertensión y la dolencia cardiaca y las drogas fueron “otras condiciones significativas”.
Para lograr una condena por los tres cargos contra el policía –de homicidio a asesinato, por los que afronta décadas de cárcel–, el fiscal deberá convencer a los doce miembros del jurado de que la acción de Chauvin fue “el factor causal” de la muerte. La acusación no ha de probar que la maniobra del agente fue el único elemento que propició el óbito del detenido.
Floyd no es la víctima perfecta, pero eso no es lo que se juzga en una vista oral que se ha convertido en un
La policía halla rastros de droga en el coche de Floyd, aunque meses atrás ya lo registró y no encontró nada
termómetro del cambio racial.
Este caso, el primero que llega a juicio en la era de Black Lives Matter, originó las mayores protestas que se recuerdan desde la lucha por los derechos civiles. La comunidad afroamericana examinará que significa la justicia después de muchos casos en los que los policías han sido exculpados tras matar a negros: Michael Brown, Eric Garner, Breonna Taylor, Tamir Rice...
En el estrado se juzgará a Chauvin –otros tres colegas tendrán su vista oral en verano–, que detuvo a Floyd por un supuesto billete falso de 20 dólares. Hay quien sostiene que esto no es un juicio al sistema judicial estadounidenses. Pero numerosas voces observan que un problema personal de Floyd se ha convertido en un examen al racismo de Estados Unidos.