Tres candidaturas de izquierdas tratarán de arrebatar Madrid al PP
Cerrado el plazo para la presentación de las listas para las elecciones del 4-M
El viejo profesor Ángel Gabilondo en el PSOE, la anestesista Mónica García en Más Madrid, la arquitecta Rocío Monasterio en Vox y dos paracaidistas, como Pablo Iglesias en Unidos Podemos y Edmundo Bal en Ciudadanos, presentaron ayer oficialmente sus milicias para dar la batalla electoral a Isabel Díaz Ayuso a quien todos los sondeos proyectan una holgada victoria en los comicios del 4-M en Madrid, donde se plantea una singular batalla política. Un triunfo tan evidente que el conjunto de los contendientes, cada uno por motivos diversos, solo aspiran a intentar amortiguarlo para que la mayoría pronosticada sea amplia y no absoluta.
Al vencedor en el 2019, el PSOE, el adelanto electoral le pilló en fuera de juego. Con un líder regional que estaba de salida aguardando a su nada disimulado nombramiento como próximo Defensor del Pueblo, los socialistas han decidido concederle a Ángel Gabilondo una vida extra para retener su posición dominante en la izquierda y a ser posible, para engordarla con los votantes decepcionados de Ciudadanos para aspirar a liderar una gran coalición de centro izquierda que desaloje al PP de la presidencia de Madrid. Para ello, contará con Hana Jalloul, la exsecretaria de Estado de Migraciones a la que seguirá la presidenta del Senado, Pilar Llop, como número tres.
En Cs aún tratan de reponerse del atragantamiento sobrevenido por la fallida moción de censura capitaneada en Murcia. Con Ignacio Aguado –exvicepresidente regional– quemado por su turbulenta relación con Ayuso en la recién terminada legislatura y sin tiempo para lanzar un nuevo candidato, han optado por Edmundo Bal. El número dos del partido a nivel nacional conserva prácticamente el mismo equipo del 2019 en un lavado de cara con el que intentará evitar que el partido naranja colapse tras el goteo de deserciones que amenaza incluso con dejarle fuera de la Asamblea de Madrid.
Al frente de Unidas Podemos estará Pablo Iglesias. El segundo paracaidista para este 4-M tras abandonar por sorpresa la vicepresidencia segunda del Gobierno “para frenar el avance de la ultraderecha en la región”. Digerido su fallido intento de sumar fuerzas con Más Madrid en una candidatura conjunta, Iglesias liderará la lista morada relegando a su portavoz nacional, Isa Serra, al número 2, y contando con sonados fichajes
Los sondeos colocan a la actual presidenta al borde de la mayoría absoluta pese a la irrupción de Iglesias
como el portavoz del sindicato de manteros, Serigne Mbayé, y la activista antidesahucios, Alejandra Jacinto, para marcar una agenda de corte social.
Más Madrid, por su parte, lo fía todo a, su cada vez más mediática candidata, Mónica García, convencidos de que su papel de martillo pilón de oposición a Ayuso en la Asamblea, le permitirá escalar posiciones y convertirse en la tercera fuerza ante el pronosticado descalabro de Cs.
La lista de rivales de Ayuso se cierra con Rocío Monasterio, quien repetirá en una lista que Vox ha confeccionado sin grandes novedades pero que dirigirá Santiago Abascal en persona. El presidente nacional de la formación de ultraderecha maniobrará para diferenciar su mensaje y su papel de socio fiel del PP ante la posible fuga de votantes que reconocen sentirse casi tan identificados con Ayuso como con su propia candidata.
Todos ellos, o bien para desalojarla de la Puerta del Sol o bien para evitar ser fagocitados, rivalizarán con la dirigente popular quien, impulsada por los sondeos, ultima una precampaña presidencialista en clave nacional. Fortaleciendo su papel de oposición oficiosa al Gobierno central presidido por Pedro Sánchez, pero reservando un hueco a Toni Cantó como spoiler de su jaque mate a Ciudadanos en la Comunidad.