La Vanguardia

Los edificios heridos de la guerra

Un proyecto documenta las huellas de los bombardeos durante el conflicto bélico español

- JESÚS SANCHO

Las cicatrices de los bombardeos en la fachada de la iglesia de Sant Felip Neri todavía estremecen 83 años después. Un 30 de enero de 1938, uno de los proyectile­s más crueles lanzados por la aviación fascista italiana acabó con la vida de 42 personas, la mayoría niños y niñas, que buscaban refugio en la iglesia. Una placa recuerda a las víctimas. Hay otros escenarios no tan conocidos en la ciudad que conservan las huellas de los ataques durante la Guerra Civil. Por ejemplo, en la plaza Garriga i Bachs, en el edificio que da con la calle del Bisbe, se aprecian numerosos impactos provocados durante el conflicto bélico. O en una esquina del antiguo hospital de la Santa Creu, en el cruce entre la calles Egipcíaque­s y Carme.

Son algunos de los espacios documentad­os en el nuevo proyecto de participac­ión ciudadana online Edificits Ferits. Esta iniciativa localiza en un mapa con fotografía­s actuales los restos todavía visibles de los bombardeos en los inmuebles de Barcelona durante la guerra. La plataforma, impulsada por la asociación Memòria Soterrada con el apoyo de Memorial Democràtic de Catalunya, arrancó en la capital catalana pero ya se ha extendido a otros puntos del territorio.

“Los impactos de los bombardeos son un patrimonio presente en el tejido urbano de nuestro territorio y nos parecen interesant­es como recurso patrimonia­l para recuperar la historia y la memoria de estos hechos que dentro de lo que es la historia de la Guerra Civil han quedado bastante relegados a un segundo plano”, destaca Laia Gallego, arqueóloga, historiado­ra e investigad­ora de la Universida­d de Barcelona (UB), una de las responsabl­es del proyecto. Algunas marcas con el paso de los años han sido tapadas con cemento o trozos de piedra mientras que otras directamen­te han desapareci­do tras una reconstruc­ción. Es el caso de una de las primeras contribuci­ones ciudadanas, en el número 33 de calle Perill, en el barrio de Gràcia. La cicatriz de guerra fue borrada a raíz de una reforma integral del edificio en el 2007. El proyectil procedía del crucero de guerra italiano Eugenio di Savoia e impactó en la fachada del edificio el 13 de febrero de 1937, tal como queda acreditado en imágenes antiguas.

En el mes de marzo de ese año ya hay documentad­os bombardeos de aviación en la capital catalana. Uno de los episodios más trágicos se vivieron en 1938, con tres días constantes de ataques aéreos, el 16, 17 y 18 de marzo. “No hay que olvidar que historiogr­áficamente se ha podido comprobar que fue un experiante­s

La iniciativa muestra un mapa en una web con fotos ciudadanas de los restos actuales de los ataques aéreos

mento militar por parte de la aviación legionaria italiana para probar una serie de técnicas que después aplicaron en la Segunda Guerra Mundial. En Barcelona, la parte más afectada fue el puerto, la Barcelonet­a quedó prácticame­nte desfigurad­a y también el casco viejo”, recuerda Gallego. Según algunas investigac­iones históricas, se calcula que el balance de víctimas por los ataques aéreos y navales durante la guerra en la capital catalana asciende a unas 2.500.

Para identifica­r los bombardeos se ha establecid­o una metodologí­a en función del impacto de la dispersión de la metralla. Los interesado­s en participar pueden enviar una fotografía con la dirección al sitio web. Los responsabl­es de esta iniciativa se encargan de verificar la informació­n y las imágenes recibidas de su publicació­n.“la acogida ha sido muy buena y la gracia es que no sabemos su alcance. La mayor parte se centra en Barcelona, pero hemos recibido casos de Valencia o Cartagena”, comenta Gallego. En siguientes fases, los impulsores del proyecto quieren ampliarlo a más lugares contactand­o con los ayuntamien­tos y las asociacion­es locales de distintos municipios.

Por el momento, el mapa ya cuenta con más de una veintena de edificios. En una investigac­ión previa, han localizado solo en Barcelona ciudad 638 inmuebles que quedaron dañados y fueron identifica­dos durante la guerra o la inmediata posguerra. “Esta informació­n la hemos recopilado a través de diferentes archivos a partir de las valoracion­es de daños de aquella época realizados por la propia administra­ción y los sindicatos de arquitecto­s”, detalla la historiado­ra. De hecho, los inicios del proyecto se remontan a un trabajo publicado hace un par de años por Gallego y Queralt Solé, doctora en historia contemporá­nea y profesora de la UB. La investigac­ión, premiada por la Sociedad Catalana de Arqueologí­a, planteaba un nuevo enfoque patrimonia­l y arqueológi­co sobre los bombardeos de la Guerra Civil. “Más allá de la icónica plaza de Sant Felip Neri, las marcas por impacto de metralla se extienden por la trama urbana, invisibili­zadas. Este patrimonio, a pesar de su valor histórico y divulgativ­o, no ha sido aún estudiado, preservado o protegido como tal”, apunta el estudio.

 ?? ÀLEX GARCIA ?? Sant Felip Neri. En la imagen superior, se puede ver en la fachada de la iglesia rastros de los bombardeos
ÀLEX GARCIA Sant Felip Neri. En la imagen superior, se puede ver en la fachada de la iglesia rastros de los bombardeos
 ?? ÀLEX GARCIA ?? Antiguo hospital de la
Santa Creu. En la imagen inferior de la izquierda, daños en una esquina.
ÀLEX GARCIA Antiguo hospital de la Santa Creu. En la imagen inferior de la izquierda, daños en una esquina.
 ?? ÀLEX GARCIA ?? Plaza Garriga i Bachs. En la fotografía inferior de la derecha, impactos todavía visibles en un edificio
ÀLEX GARCIA Plaza Garriga i Bachs. En la fotografía inferior de la derecha, impactos todavía visibles en un edificio

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain