Camino de no retorno a la madurez
‘Merlí. Sapere Aude’ estrena este viernes su segunda temporada en la que el protagonista afronta un grave problema que le cambiará la vida
Empieza el segundo semestre en la universidad para Pol Rubio y su grupo de amigos de la facultad de Filosofía. El retorno a las aulas vendrá marcado por dos hechos inesperados: Pol conocerá a un hombre mayor que él por quien pronto se sentirá atraído y, por otra parte, el reencuentro casual con un viejo amigo le traerá una mala noticia que le cambiará la vida para siempre. Merlí. Sapere Aude, la secuela de Merlí, vuelve este Viernes Santo con una segunda temporada con la cual su creador Héctor Lozano y Movistar+ dan por cerrada la serie.
“El viaje de Pol esta temporada es que le surge un grave tropiezo personal que le dificulta su día a día, pero en el fondo la vida sigue y él se irá adaptando a este problema hasta que consigue llegar al final más optimista de todos los que he hecho en el universo Merlí”, adelanta Lozano, quien añade que en los nuevos episodios “prevalece la alegría de vivir y el optimismo que siempre ha habido desde el primer capítulo de la serie original” y que la intención era mostrar que “de los problemas puede salir”.
Carlos Cuevas vuelve a interpretar a este Pol Rubio que aceptará el inesperado problema que se revelará a principios de temporada (y que en este artículo no se explica para evitar un spoiler) para después “aprender a convivir con él”. El actor avanza que los dos primeros episodios “son duros”, pero que después la serie “no se recrea en el drama” sino en la decisión de
Pol de “salir adelante y conseguirlo”. En esta temporada “se coge al personaje de las solapas para llevarlo definitivamente a la edad adulta”, añade.
En este camino hacia la madurez tendrá un papel destacado Axel, donde actúa uno de los nuevos fichajes, Jordi Coll, que interpreta al encargado de las obras de restauración del paraninfo de la universidad. Este personaje, unos diez años mayor que Pol, “le hace tambalearse un poco porque es una persona independiente, adulta y vital, con quien puede tener una relación muy diferente de las chicas y chicos con quien ha estado hasta ahora, como Bruno o Tània”, dice Lozano. El problema es que “conoce a la mejor persona en su peor momento”, avisa.
Axel ya ha pasado por experiencias amorosas y Pol no ha tenido más allá de las vividas en el instituto. “Es la primera vez que Pol se encuentra el amor de cara y tiene que decidir si vale la pena implicarse o no, con todo lo que eso supone; tener delante alguien maduro, atento y que te escucha también ayudará mucho a Pol a dejarse a ir y a decidir”, revela Cuevas.
El otro fichaje destacado de la temporada es Eusebio Poncela, quien interpreta a Dino, propietario del bar de ambiente Satanassa. “Es un personaje muy curtido, un poco de vuelta de todo y con una visión diferente de la vida; para Pol será como una burbuja de oxígeno trabajar como camarero en el bar del Dino y también su relación con él”, dice Lozano. Pol se encontrará cómodo en el Satanassa “donde no será juzgado porque nadie pregunta de dónde viene alguien”, avanza Cuevas. “Dino será para Pol como un mentor vital y espiritual de la misma manera que la profesora Bolaño es una mentora académica”, compara.