“Me propuse no poder nunca reprocharme nada y aquí estoy”
Reconoce que no fue nunca de los jugadores más mediáticos de la Masia pero, a sus 21 años, Òscar Mingueza (Santa Perpètua de Mogoda, 1999) tiene claro que con trabajo y esfuerzo todo es posible. Fue en Kíev cuando Koeman le dio la oportunidad de debutar con el primer equipo. Desde entonces, ha disputado 25 partidos entre todas las competiciones y ha marcado un gol. ¿Su sueño? que se siga apostando por los canteranos.
¿Cómo fue su debut en Kíev?
Estaba un poco nervioso durante el día sin saber si jugaba o no. Pero cuando supe que estaba en el once, los nervios se calmaron. No tuve la presión ni los nervios de pensar que estaba ante el partido de mi vida. Vinieron Ter Stegen y Lenglet y me dijeron que estuviera tranquilo, me aconsejaron que estuviera atento en algunos aspectos del juego. Les estoy muy agradecido, fue muy bonita la sensación, sobre todo cuando acabé el partido y me relajé. Fue algo único e irrepetible.
¿Le ha cambiado mucho la vida desde entonces?
Mi día a día es igual. Sigo haciendo las mismas cosas con mi pareja, mis perras, voy a entrenar, veo a mi familia, juego con mis amigos al ordenador… lo único que sí que he notado es que la gente me reconoce por la calle. ¡Me paran hasta en los semáforos! Intento ser lo más cercano posible.
Tenía siete años cuando Jordi Font, ojeador del Barça, fue a ver a su equipo, el Santa Perpètua y se fijó en usted…
Era muy pequeño, pero sí que recuerdo que ese día tenía entre 38º y 39º de fiebre. Y mis padres me dijeron: “Si el médico te deja pues juebas gas, sino pues no”. Eso después de que yo les insistiese mucho, porque yo quería jugar, estaba esperando toda la semana a que llegara el fin de semana para jugar el partido... A mi padre le gusta mucho ir a esquiar y el médico le dijo: “¿Verdad que tú vas a la nieve aunque te encuentres mal?” Y mi padre dijo: “Sí”. Y el médico le respondió: “Pues deja que el niño juegue, él sabe cómo se encuentra”. En aquella época se podían hacer todos los cambios que quisieras y recuerdo que el entrenador me iba cambiando. Me decía no corras mucho, aguanta arriba… y yo corría como siempre. Y luego mi padre me contó que Font, un ojeador del Barça, le preguntó por mí sin saber que era mi padre. Y ahí empezó todo.
¿Tenía la sensación de que pasaba desapercibido?
En general a un defensa le cuesta más llamar la atención y es verdad que había otros de los que se hablaba más que de mí. Nunca fui la superestrella ni el supercrack pero al final jugaba e iba subiendo de categoría. En el juvenil B con Quique Álvarez crecí más porque era un fútbol diferente que costaba más, jugacon gente más mayor… en la Youth League tampoco era de los más mediáticos pero noté que se hablaba algo más... Y luego vino el Barça B, equipo en el que no tuve la suerte de jugar mucho.
Pero llegó el primer equipo…
Al final era estar preparado por si llegaba el momento. No sabes si pasará pero me conciencié bien. He tenido momentos duros, de tener más o menos ganas, pero me propuse estar bien físicamente y preparado mentalmente para lo que pudiera pasar. Y que sobre todo no pudiera reprocharme nada ni dejar nada dentro de mí. Darlo todo en cada entrenamiento y en cada partido. Y aquí estoy.
¿Entonces se planteó irse?
Sí, en el Barça B pensé en buscar una salida porque jugaba poco. No digo que tuviera ofertas pero sí que por mi mente pasó la idea de buscarlas, porque al final es en los partidos donde creces y donde la gente te ve. También reconozco que mi actitud no era la mejor, al final yo sé que si no juegas no es solo por una cosa… Pero tuve la capacidad de reponerme, coger fuerzas y me puse las pilas. Luché y decidí apostar por quedarme aquí.
¿Qué opina de sus compañeros
SU EVOLUCIÓN EN EL BARÇA
“Es verdad que nunca fui la superestrella ni el supercrack ni era mediático, pero al final jugaba e iba subiendo de categoría”
SU HERMANA, ARIADNA MINGUEZA
“Estoy orgulloso de su debut con el primer equipo. Son las mejores. Llevan cuatro semifinales en cinco años en Europa”
SU MOMENTO MÁS DIFÍCIL EN EL BARCELONA
“En el Barça B pensé en marcharme. Reconozco que mi actitud tampoco era la mejor, al final yo sé que si no juegas no es solo por una cosa”
EL APOYO DE LA AFICIÓN
“He notado que la gente me reconoce por la calle. ¡Me paran hasta en los semáforos! Intento ser lo más cercano posible”
SU APOYO EN EL VESTUARIO
“Al margen de los jóvenes, me llevo muy bien con Alba y con Busquets. Ellos también se han criado aquí y eso se nota”
SU RELACIÓN CON EL ENTRENADOR
“Siempre le estaré muy agradecido a Koeman por todo lo que ha hecho por mí. Pero también por la continuidad que da a los jóvenes”
LOS CANTERANOS CON MÁS PROYECCIÓN
“Al margen de Collado también están Ilaix y Konrad de la Fuente. Y suben con fuerza Nico González y Alejandro Balde”
LA NOVATADA DEL VESTUARIO
“Cuando llegas te hacen cantar una canción. Me tocó cantar flamenco. A los que suban también les tocará”
Araújo, Piqué, Lenglet y Umtiti?
Crecí viendo la pareja Puyol-piqué. Han sido mis dos referencias. Me he identificado más con Piqué porque nunca he sido un jugador muy agresivo, tiraba más de intuición o de inteligencia para robar porque el cuerpo a cuerpo no es mi mejor virtud. También seguí mucho a Umtiti,que era de mis favoritos. Es un jugador con buena salida de balón, alguien que mete caña. De Lenglet diré que para mí es también un buen líder, ayuda al equipo y tiene un buen juego aéreo. Y a Ronald Araújo le he visto evolucionar mucho. Diría incluso que parece otro porque cuando llegó estaba perdido, no hacía bien dos rondos seguidos, no se hacía con el juego de posición… pero se sacrificó mucho. Veníamos de desayunar en el Barça B y le veías siempre trabajando. Me parece que ha mejorado mucho, físicamente es un privilegio, un jugadorazo defensivamente y sí, también es un líder.
¿Eric García le encaja?
Sí. Al final es un jugador que se ha criado en la Masia y que también ha crecido en el Manchester City de Guardiola, que es un equipo que tiene una filosofía muy parecida a la del Barça, la de presionar y tener las líneas muy avanzadas. Es un central espectacular, con la selección está haciendo muy buenos partidos y aquí necesitamos a los mejores. Y para mí es un privilegio estar al lado de los mejores.
¿Qué prefiere, jugar de central o de lateral?
Me siento más cómodo jugando de central. Pero me gusta más ser lateral. Sea lo que sea, siempre lo intentaré hacer bien, dar lo máximo y cumplir.
¿Los canteranos tienen la sensación de que se apuesta más ahora por los jóvenes?
Sí, claro que se nota que Koeman da oportunidades a los jóvenes. Pero sobre todo se agradece la continuidad. Yo siempre le estaré muy agradecido a Ronald Koeman por todo lo que ha hecho por mí.
¿Y de los canteranos que suben, a quién recomienda?
Al final hay jugadores con mucho potencial. De mi edad está Àlex Collado, también Oriol Busquets que ahora mismo está teniendo mala suerte con las lesiones pero que lleva muchos años en el club y con experiencia. También están Ilaix y Konrad, a los que ya se ha visto en el primer equipo, pero si miras abajo también suben con fuerza Nico González o Alejandro Balde. Hay buenos jugadores que espero que tengan sus oportunidades.
¿Está preparando ya alguna novatada para ellos? (Risas) Cuando empiezas siempre hay que cantar una canción delante de todos. En mi caso fue flamenco… Lo tuve que hacer en la selección y en el primer equipo. A ellos también les tocará claro.
A Messi se le ve sonreír rodeado de jóvenes…
Él está contento con el equipo. Intentamos hacer una buena piña, estar unidos y trabajar bien y al final eso es lo importante, que estamos juntos, nos esforzamos y tenemos una buena actitud. Espero que se quede, para mí es un placer jugar con él .
¿Con quién se lleva mejor de los veteranos?
Sobre todo con los catalanes. Con Jordi Alba y Sergio Busquets que al final se han criado también aquí. Pero me llevo muy bien con todos, me han acogido muy bien, me han cuidado mucho y estoy muy agradecido.
Àlex Collado acaba de renovar hasta el 2023. Usted lo tiene pendiente…
Me alegro mucho por Àlex, hemos compartido muchos momentos y muchos años en el Barça. Y de mi renovación, pues se empezará a hablar pronto y a ver cómo va. Soy optimista.
Fue titular en el Parque de los Príncipes. ¿Reconforta saber que ha formado parte de ese 1-1 con el que se mejoró la imagen blaugrana en Europa ?
Caer eliminados de la Champions y sobre todo tan pronto no es muy agradable. Pero a pesar de eso, estoy muy orgulloso por el nivel y la actitud que mostró el equipo. Quedaban 15 minutos, teníamos que marcar tres goles para ir a la prórroga y la actitud era la misma que si nos faltara uno. Espero que cada año podamos estar mejor .
¿Habrá doblete?
Ese es el objetivo, mientras haya posibilidades lucharemos hasta el final. Al final la única manera es seguir con esta actitud, con esa intensidad con el balón y sin el balón.
Mañana juegan contra el Valladolid y después llega el clásico...
En las categorías inferiores ya jugué algún clásico y es verdad que siempre es una motivación extra. Antes toca el Valladolid, hay que estar concentrados, sabemos que nos lo puso difícil en Pucela. Y luego pues ya pensaremos en el Real Madrid.
Dice su padre que se deja usted barba para hacerse respetar…
(Risas) Eso una broma que tenemos los dos. Pero al final me dejo barba porque me gusta por estética.
En su familia hay mucho fútbol...
Mi hermana (Ariadna Mingueza) ha pasado por todas las categorías y ya ha debutado con el primer equipo. Ellas son las mejores y se está viendo, llevan cuatro semifinales en cinco años en Europa y tres consecutivas. Para mí es un orgullo ver cómo crece. Espero que en unos años pueda consolidarse. Y mi padre ahora es vicepresidente del Santa Perpètua.
La gente no sabe que también toca el piano…
Estudié piano durante 10 años. Y la verdad es que lo tocaba muy bien. Ahora la verdad es que no sé si dominaría tanto…
¿Dónde se ve en 10 años?
Me gustaría estar en Barcelona, mi ciudad, y jugando en el club que me ha visto crecer. Ojalá sea así.