Yolanda Díaz anuncia una prórroga de los ERTE más allá del 31 de mayo
La ministra de Trabajo apuesta por un esquema similar al actual
La vicepresidenta tercera y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, anunció ayer que el Gobierno aprobará la prolongación de los ERTE actualmente en vigor más allá de su actual periodo de efectividad, que termina el próximo 31 de mayo.
La flamante vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, aprovechó ayer un acto de la organización empresarial de las pequeñas y medianas empresas Cepyme para ratificar la renovación de una nueva prórroga de los ERTE más allá del próximo 31 de mayo. Además, se mostró partidaria, ante los empresarios, de mantener una “fórmula similar a la actual”.
La negociación con los agentes sociales sobre las condiciones y la nueva vigencia de los ERTE covid comenzará “en breve”, aseguró Díaz. Poco después, desde Zaragoza, el ministro de Inclusión, Seguridad
Social y Migraciones, José Luis Escrivá, concretó que buscarán un acuerdo con la patronal y los sindicatos a principios del mes de mayo.
Escrivá y la vicepresidenta segunda, Nadia Calviño, ya habían defendido en los últimos días que la nueva etapa para los expedientes de regulación temporal de empleo impulsados con la pandemia se ajustará para poner el énfasis en promover la reactivación de trabajadores afectados. “Estamos cerca del final”, aseguró ayer el ministro de Seguridad Social. “Estamos preparando la salida con un nuevo esquema de protección, que en este caso tendrá que estar más diseñado para acompañar a las empresas que están saliendo y que todavía no han salido en el proceso de recuperación”, argumentó. Durante las negociaciones de anteriores prórrogas, los departamentos de Trabajo y Seguridad Social han evidenciado algunas diferencias sobre las adaptaciones del mecanismo, que en los peores momentos de la pandemia llegó a proteger a 3,6 millones de trabajadores y más de medio millón de empresas. Desde otoño, la cifra de empleados en ERTE ha estado estancada en torno a las 750.000 personas. Desde el pasado mes de junio, el equipo de Escrivá ha defendido la importancia de bonificar no solo las cotizaciones de los trabajadores con el empleo parcial o totalmente congelado sino también de aquellos que abandonaban el ERTE.
Los distintos miembros del Ejecutivo han apostado desde un primer momento, todos a una, por que los ERTE, considerados clave en la protección de las rentas, el empleo y el tejido empresarial, vayan a durar “el tiempo que haga falta”. Ayer, la vicepresidenta Díaz destacó que “un instrumento tan capital para preservar el empleo como han sido los ERTE ha beneficiado principalmente a pymes y autónomos. De hecho, uno de los grandes logros de los ERTE ha sido que las pequeñas y medianas empresas y los autónomos hayan podido acogerse por vez primera a este sistema de protección”.
Pese a las peticiones de la patronal de aprobar periodos más largos de vigencia, que permitieran reducir la incertidumbre para las empresas afectadas por la lucha contra la covid y las sucesivas restricciones a la movilidad y la acti
A PARTIR DEL 31 DE MAYO Tanto Calviño como Escrivá defienden centrarse en reactivar trabajadores
CABALLO DE BATALLA
La patronal insiste en exigir la eliminación del compromiso de empleo
vidad, desde el Gobierno de Pedro Sánchez han optado por ajustar los plazos argumentando que, de esta manera, los ERTE se iban adaptando de una forma más eficaz a una situación cambiante. Esta misma semana, el secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, recalcó la necesidad de esperar a ver cómo va evolucionando la pandemia y el proceso de vacunación para tomar decisiones sobre la nueva prórroga de los ERTE.
Antes de que se abra la nueva mesa de negociación, se da por descontado que la patronal redoblará su presión sobre el Gobierno para eliminar el compromiso de empleo que viene aparejado con los ERTE covid. La CEOE insiste en que, a medida que se ha prolongado la crisis, esta exigencia a los empresarios con las cuotas de la Seguridad Social bonificadas es más difícil de atender y puede propiciar el cierre de negocios.
El Ejecutivo se ha mantenido inflexible hasta el momento, alegando que el esfuerzo presupuestario para mantener este sistema de protección ha resultado enorme: 7.000 millones de euros en exoneración de cotizaciones hasta mayo y más de 16.000 millones de euros en prestaciones a los trabajadores afectados.