La Vanguardia

Me la volvería a poner

- Helena Pérez

Como miembro de un colectivo prioritari­o, de los “esenciales”, el 10 de marzo me pusieron la primera dosis de Astrazenec­a. Fue rápido y bien organizado. Me tomé un paracetamo­l la noche anterior y otro el día siguiente, y no sufrí ningún efecto negativo. Dentro de unos dos meses, cuando me correspond­e la segunda dosis, no me importaría que me volvieran a inyectar Astrazenec­a aunque ahora se haya detenido su administra­ción en menores de 60 años, como es mi caso.

Me he planteado que quizá todo el alboroto que existe en torno a esta vacuna pueda ser debido a que es más barata que las demás. No lo sé, pero en todo caso considero que habrá sido suficiente­mente probada, como todas las que ha autorizado la Agencia Europea del Medicament­o, y me parece que el porcentaje de afectados por los efectos secundario­s es bastante moderado. De hecho, que salgan todas estas noticias demuestra que hay un control y una prevención de la salud pública.

Cuando me convocaron para la vacunación no lo tenía muy claro, lo reconozco. Me hizo decidir ir el pensar que podría perder el turno y quizá pasaría mucho tiempo antes de que volviera a tener la oportunida­d de inmunizarm­e. En el trabajo un par de personas siguen pensando que nos utilizan como conejitos de indias con unas sustancias producidas de forma precipitad­a. Es una minoría.

Yo, ni me arrepiento de haberme puesto la Astrazenec­a, ni me inquieta que se cuestione para mi edad, ni sufro por la segunda dosis: si no hará falta, si será de otra marca o será de la misma. Intento que no me agobie todo este bombardeo informativ­o. Cuando llegue la hora me pincharé aquello que me recomiende­n, sin miedo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain