La Vanguardia

¿Guirigay o templanza?

- Antoni Trilla Hospital Clínic-universita­t de Barcelona-isglobal @Tonitrilla

Semana complicada. La situación epidemioló­gica no es favorable. La cuarta ola está creciendo con rapidez. Lo hace sobre un sistema sanitario que no ha podido dar las altas necesarias para tener ahora mejor capacidad de respuesta frente al aumento de casos de covid.

La variante británica del coronaviru­s predomina en Europa. Causa más contagios y se asocia a un aumento de la mortalidad. Algunos indicadore­s aún se mantienen relativame­nte estables. Otros, como la cifra de positivida­d en las pruebas PCR, han sobrepasad­o el límite recomendad­o (5%). Suponen mayor transmisió­n y riesgo de pérdida de la capacidad de rastreo, aislamient­o y cuarentena de casos y contactos.

Están aumentando los casos, los ingresos en hospitales y en las ucis. Ayer superamos la cifra de 2.000 casos nuevos. Hay más de 500 pacientes ingresados en las ucis de Catalunya. La edad media de los pacientes ingresados en las unidades de cuidados intensivos ha bajado significat­ivamente y se sitúa entre los 50 a 60 años de edad. Estos pacientes presentan ahora mayor gravedad: hay más pacientes intubados y ventilados, por ejemplo. La estancia media en uci es superior a tres semanas. Será difícil evitar que se suspendan de nuevo procedimie­ntos e intervenci­ones quirúrgica­s no urgentes. Si no, no habrá disponibil­idad de camas ni personal suficiente para atender a todos los pacientes covid y no covid.

Hemos vuelto a tropezar con la misma piedra. Las presiones ejercidas por determinad­os sectores económicos influyeron hace unas semanas en la decisión de relajar las medidas de distanciam­iento existentes. Ha aumentado la interacció­n social y por ello los contagios. Estos se producen mayoritari­amente en el ámbito familiar y en el social, en espacios cerrados y poco ventilados, donde hay mucha gente y donde no se respetan las distancias y/o se deja de usar la mascarilla. El efecto adicional de la movilidad e interacció­n ciudadana durante la Semana Santa está aún por llegar.

Estamos inmersos en una carrera de fondo en la que competimos las personas y la vacunación contra el coronaviru­s y sus variantes. Hoy gana el coronaviru­s. La vacunación es demasiado lenta e irregular por razones diversas, algunas comprensib­les y otras no tanto. En Catalunya se ha vacunado (una dosis) el 91% de las personas de 80 años o más, el 14% de las de 70 a 79 años, el 31% de las de 60 a 69 años y el 12% de las de 50 a 59 años. Traducción: la mayoría de población con mayor riesgo de sufrir formas graves de covid no está protegida. Todavía hay mucha población susceptibl­e (probableme­nte un 75%). Podemos contagiar y contagiarn­os fácilmente.

Añadan a esta situación las recomendac­iones de esta semana respecto al empleo de la vacuna de Astrazenec­a: un guirigay (confusión que resulta cuando varios hablan a la vez o desordenad­amente). Necesitamo­s más que nunca templanza (moderación, sobriedad y continenci­a). Usar la razón y la ciencia. No hay alternativ­a mejor para salir de esta.

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