Telemadrid se le atraganta a la presidenta

Los sondeos siguen sonriendo a la presidenta de Madrid, pero la campaña electoral que ha arrancado esta madrugada no ha empezado con buen pie ella. Tras confirmarse el pasado jueves la expulsión de su fichaje estrella, Toni Cantó, de las listas electorales al 4-M, Isabel Díaz Ayuso no ha tenido más remedio que dar su brazo a torcer y guardar para otra ocasión su veto a Telemadrid. La candidata del PP a la reelección tiene previsto participar en un único debate electoral y su idea era hacerlo el miércoles 21 de abril en la Academia de la Televisión. Una decisión justificada por su equipo de campaña por el “interés nacional” que suscita la contienda madrileña y al que, en su opinión, la Academia podía responder al “representa ar todas las cadenas nacionales”. Sin embargo, la determinación del ente madrileño por mantener el pulso y la sucesiva aceptación del resto de candidatos a la invitación cursada para debatir el jueves 22 acabó neutralizando el movimiento táctico de Ayuso, decidida a rebajar el protagonismo de la cadena autonómica con la que mantiene una batalla de largo recorrido. Se trata del enésimo enfrentamiento entre la presidente y la cadena autonómica que han mantenido una tensa relación desde su llegada a la Puerta del Sol. A principios del 2020, pasados seis meses desde su investidura, la dirigente popular no había concedido aún una sola entrevista al ente público. Una anomalía que la propia Ayuso justificó señalando que es “la única presidenta autonómica y del Gobierno de España que tiene una televisión que le es crítica”. A partir de ahí el fuego cruzado no ha hecho más que subir de nivel con disputas por el contrato-programa, el tratamiento a la información relativo al Gobierno regional o incluso las cuantías que requerían la autorización de la Consejería de Hacienda para determinados eventos. Hasta el punto de que Ayuso ha llegado a amagar con cerrar Telemadrid al considerar que “ya no es un servicio público esencial”. Una asfixia económica que dista mucho de las llamadas a dejar de poner a la cadena en “tela de juicio” que ella mismo realizó a la oposición en el 2015, cuando la ahora presidenta era la portavoz del PP en la Comisión de Control al Ente Público de Radio Televisión de Madrid durante el gobierno de Cristina Cifuentes. / Asier Martiarena