Tristán y Cósima se reivindican
Los hijos de Ágatha Ruiz de la Prada y Pedro J. Ramírez trabajan con su madre
“Mi sueño es poder superar a mis padres”. Ambicioso deseo de Cósima Ramírez de la Prada (31), hija de dos acusadas personalidades como son el periodista Pedro J. Ramírez y la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada. El fundador de El Mundo y El Español y la aristócrata (marquesa de Castelldosrius y baronesa de Santa Pau) se separaron en el 2016, después de 30 años y dos hijos. Cósima y su hermano Tristán (34) trabajan en la firma de moda de su madre como directora creativa y CEO, respectivamente.
Para la joven, el secreto de la complicidad de los tres en el trabajo tiene un nombre, Tristán al que califica como El buda de la familia: “Trabajar en un espacio colorido, como el nuestro, ayuda a generar buen ambiente, pero desde que él entró ha sido maravilloso, porque nos aporta calma. Mi madre y yo cada vez nos parecemos más y hay choque de egos”, ríe en un encuentro virtual de los dos hermanos como embajadores del nuevo híbrido SUV C5 de Citroën.
Tristán se ha conectado desde Madrid, y Cósima, desde Londres, donde vive desde septiembre, cuando decidió realizar un paréntesis laboral y volver a la universidad. “En este momento tan confuso he intentado ver el lado positivo y buscar otras salidas”. Allí sigue los pasos de Virginia Woolf, escritora a la que admira por su feminismo y sentido del humor. “Suelo idealizar el pasado”, dice.
A Tristán, gran admirador del historiador William Dalrymple, “una especie de Indiana Jones, en versión moderna, al que conocí en India”, la pandemia le ha obligado a trabajar desde la sede de la firma. “Antes viajábamos mucho porque desfilábamos por todo el mundo. Un ritmo frenético. Y al paralizarse todo sentí pánico. Pero hemos podido potenciar las redes sociales, la venta por internet y preparar los desfiles con más calma, como el último de Madrid, aunque no existía esa sensación de fiesta de otras veces”. Y apostilla Cósima: “Para mi madre, el día del desfile suele ser más fiesta que su cumpleaños”.
Ambos creen que no han dado demasiados problemas a sus padres “han tenido suerte con nosotros”, dice confiada Cósima. “¡Pero si tú en la adolescencia te declaraste anti-ágatha!–le recuerda su hermano. Pedías a tus amigas ropa negra, porque decías que querías vestir como una persona normal”.
Los dos ven muy contenta a su madre, gracias a Luis Gasset, su pareja desde hace casi un año. “Hemos conseguido que él vista con más color”, comenta Tristán, que explica que ha comido con él y sus hijas en alguna ocasión.
De Ágatha Ruiz de la Prada aseguran que han heredado su sentido del humor, optimismo y el saber adaptarse a cualquier situación. Y también han hecho suyo su refrán preferido: “Ande yo caliente, y ríase la gente”. Y de Pedro J. Ramírez ha heredado el gusto por lo intelectual y la historia. “Frente al entretenimiento rápido está el consumo lento de un libro”, asegura Cósima que aunque participó en el programa Quien viene a cenar edición Gourmet su ideal sería un reality de libros “La isla de los intelectuales se podría llamar”, bromea.
Tristán, por su parte, acompañó a su madre a Costa Rica para Planeta Calleja, y le gustaría repetir con el aventurero. “Me encanta viajar. He recorrido China en moto, he vivido en India...ahora paseo a caballo, y conozco muy bien los límites de la Comunidad de Madrid.”
Para cuando se levanten las restricciones,tristán sueña con recorrer la Sierra de la Estrella en Portugal, y Cósima con un viaje gastronómico por el País Vasco.
El primogénito de la diseñadora aporta calma entre las dos mujeres, cuya relación es “un choque de egos”