Guerra abierta en el fútbol por el anuncio de la Superliga
UEFA y gobiernos rechazan el proyecto mientras los clubs promotores cuentan ya el dinero
El anuncio oficial de la creación de una Superliga europea por parte de doce clubs de la élite continental ha desencadenado una marea de réplicas, amenazas y advertencias sobre el apocalipsis que se avecina si el fútbol acaba rompiendo su estructura clásica, ya sobradamente deteriorada, con una nueva competición semicerrada que perpetuaría el dominio de los mismos protagonistas. Estos doce clubs (Real Madrid, Barcelona y Atlético en España; Inter, Juventus y Milan en Italia; Arsenal, Liverpool, los dos Manchester, Tottenham y Chelsea en Inglaterra) han lanzado un desafío monumental a la UEFA, que ha sido la primera en responder con contundencia.
“Es fruto de la avaricia, el egoísmo y el narcisismo de algunos”, ha clamado Aleksander Ceferin, el presidente del fútbol europeo. “Es un escupitajo en el rostro a todos los amantes del fútbol”, ha añadido, y ha anunciado que preparan “todas las sanciones que podamos cuanto antes” y especialmente la consideración de proscritos para los clubs disidentes e incluso la expulsión de las competiciones internacionales de selecciones de los futbolistas que militan en los llamados clubs fundadores de la Superliga.
La UEFA mantuvo ayer en pie su reforma anunciada de la Liga de Campeones, que entraría en vigor en el 2024, y que ya era una medida de contención pensada para satisfacer a los clubs más potentes de Europa. Pero la gran preocupación ahora es cómo vehicular la respuesta oficial a la Superliga. “Me enfada ver que este equipo de doce ricos quiere robar el dinero de los demás, porque les da igual todo. Hacen un comunicado hablando de solidaridad, aunque solo les importan sus bolsillos y su fama personal, pero les vamos a hacer famosos de una forma que no quieren. Estoy
tranquilo de que haya ocurrido porque ya sabemos quién es quién y quién ama al fútbol. Lo peor es escuchar rumores de reuniones en salas oscuras”, añadió Ceferin.
Otro miembro destacado de la UEFA, el presidente de la Federación de Dinamarca Jesper Møller, ha llegado a especular con una posible sanción inmediata a Real Madrid, Manchester City y Chelsea, “que quedarían expulsados de la actual edición de la Liga de Campeones, sin llegar a disputar las semifinales”. Møller, que es miembro del Ejecutivo de la UEFA, señala que en la reunión extrordinaria del próximo viernes todo puede producirse. “Luego ya veríamos como acabar esta Champions”, indicó.
La posición abiertamente contraria al cisma del fútbol ha llegado desde todos los ámbitos. Desde el político se han pronunciado en términos similares desde presidentes y primeros ministros hasta portavoces diversos de la Comisión Europea.
Son numerosos los futbolistas y clubs españoles que se han manifestado en contra, en general todos los que han quedado fuera de la Superliga. El Espanyol ha condenado “enérgicamente” una
competición que define como “secesionista y elitista” y que “ataca los principios de la competitividad abierta y del mérito deportivo”. Ander Herrera (PSG) señaló que no podía mantenerse callado frente al “robo” por parte de “los ricos” del fútbol. Para hallar alguna versión de cierta neutralidad o precaución dentro del mundo del fútbol hay que recurrir a los afectados indirectamente, como Thomas Tuchel (Chelsea), quien dice confiar “en que mi club tome la decisión correcta”, o Diego Simeone: “Estoy preparado para entrenar donde me digan”.
EL PRESIDENTE DE LA UEFA
“Es fruto de la avaricia y el egoísmo, un escupitajo en el rostro a todos los amantes del fútbol”
JESPER MØLLER, DE LA EJECUTIVA “Podríamos llegar a expulsar al Madrid, el City y el Chelsea de la actual Liga de Campeones”