Mujeres, odisea en busca de su espacio
En la Rotonda del Cercle del Liceu, las mujeres que pintó Casas al despuntar el siglo XX dan la bienvenida con sus elegantes tocados a las ponentes de este simposio que bajo el título de Mujeres en busca de su espacio ha organizado el club para hablar de feminismo. De feminismo y de experiencias vitales, ya sea en el ejército, en la dirección musical, en escuelas de negocios o en literatura.
Situadas para la foto, la escritora Najat El Hachmi conversa con la socióloga de género Patrícia Soley y la directora de orquesta Lucía Marín. Patricia Ortega, la primera mujer general de brigada de las fuerzas armadas españolas, charla con el presidente y el vicepresidente de la entidad, Francisco Gaudier y Pepe García Reyes; mientras que Eugenia Bieto, la primera alumna, profesora y directora que tuvo Esade, habla con el historiador José Enrique Ruiz-domènec, que hará una introducción al despertar de las mujeres en diversos siglos. Inspirado por la poeta iraní Táhirih, Ruiz-domènec habla de la historia de ese despertar y de cómo en el siglo XII las mujeres promovieron la poesía trovadoresca y la aparición de la novela y el amor cortés. “Su papel sumiso es una invención de la misoginia del siglo XIX”, dice. Soley (premio Anagrama de ensayo) toma el relevo desde la Revolución Francesa hasta nuestros días antes de que empiecen los testimonios.
“Mi madre me recomendó hacer matemáticas: ‘es más compatible con el matrimonio’, y yo, feminista del Liceo Francés, dije ¿ah sí?, pues hago Esade”. Lo cuenta Bieto, que fue durante cinco años la única mujer entre 85 estudiantes.
La premio Nadal Najat El Hachmi emociona a la cuarentena de comensales que han acudido al acto con el relato de ese viaje migratorio desde Marruecos que le permitió ser la primera mujer de su familia en ir a la escuela. “Se me iban imponiendo las normas que se les imponían a las mujeres: ‘este es el último año de estudios’. Lo bueno de escribir es que se puede hacer de manera discreta”.
Lucía Marín, doctora por la Universidad de Kentucky, indica que solo un 5% de los conciertos en España han sido dirigidos por mujeres y de las 30 orquestas profesionales que hay solo una tiene una titular. “La conquista empieza por la conquista del espacio de
Patricia Ortega, la primera general de brigada de las fuerzas armadas, cita a De Beauvoir
uno mismo, superar los miedos y hallar tu pasión”.
Y por último, la general Ortega, ingeniero agrónomo, apunta en presencia de su teniente general José María Solom y el general de brigada Joaquín Broch, que cuando en 1988 se abrió la puerta a las mujeres en el ejército, solo un 34% de los españoles estaba a favor. “Hoy es un 94%, y es un logro de la institución”, dice. “Hubo destinos dos tazas, destinos florero, pero eso está superado. El gran lastre es la maternidad. Él con tres hijos es un hombre seguro. Ella con tres hijos es un problema”. Y ahí cita El segundo sexo de Simone de Beauvoir –“el corazón patriarcal y el cerebro moderno”–, y Una habitación propia de Virginia Woolf. “Y mira, aún hoy hablamos aquí de la mujer en busca de su espacio”.