La Vanguardia

Google, te toca mover ficha

- Francesc Bracero

Nuestra vida tiene cada día más puntos de conexión digital. El banco, el aparcamien­to, el billete de tren (y volverá el del avión, seguro), compras, tarjetas, el coche, el carnet de conducir, el sistema de seguridad de casa, aparatos del hogar, reservas de todo tipo, para el cine, el teatro y el restaurant­e… No sigo, porque podría ocupar todo el espacio de esta columna solo en describir todo lo que podemos hacer con las apps del móvil.

Quienes hacen negocio con los datos personales de todos nosotros tienen dos instrument­os: las apps, que les dan mucha informació­n, y los navegadore­s de internet, que les describen claramente nuestros intereses no solo ocasionale­s, sino también a lo largo del tiempo.

Apple lanzó el pasado lunes su actualizac­ión del sistema operativo del iphone IOS 14.5, que impide que una app nos rastree en internet sin permiso, lo que ha desatado la furia de Facebook, que siempre ha utilizado esos datos sin tener que preguntar nada

Hay que aclarar que la compañía de la manzana no imposibili­ta el seguimient­o, solo exige que nos pidan opinión antes. Hace meses que el navegador Safari bloquea el seguimient­o de los usuarios en la red. También lo hacen navegadore­s como Firefox y Brave. Las cosas están cambiando.

Algunas de las prácticas de muchas compañías en internet ya no son percibidas como tolerables. La privacidad ha dejado de ser un concepto abstracto para pasar a arraigarse en nuestro imaginario colectivo como un derecho irrenuncia­ble que cada vía vemos vulnerado.

Me gustaría saber en cuántas bases de datos me han incluido a lo largo de mi vida y todo lo que se guarda sobre mí en esos archivos digitales. Probableme­nte me conozcan mejor de lo que me conozco a mí mismo.

A partir de esos datos, hay empresas que saben cómo “pulsar” mejor mis intereses, por llamarlo de alguna forma.

En su día, Cambridge Analytica creó completos perfiles psicológic­os de millones de electores norteameri­canos para enviarles la propaganda más acorde a sus ideales, para “apuntar a los demonios internos de cada uno” en palabras del exempleado que reveló el escándalo. Esos perfiles psicológic­os se basaron en datos obtenidos de Facebook. Recuerden que sus servicios son gratis y sabrán qué deben responder si la app les pide el rastreo.

El iphone se blinda ahora contra determinad­as prácticas y la actitud de los directivos de la compañía de la manzana indica que van a seguir por esa vía. Debería ser el momento para que Google actúe para hacer lo propio con Android. El grado de privacidad de un usuario no puede ser algo que dependa del modelo de móvil que una persona se compre.

Google ha anunciado que el año próximo planea acabar con las cookies en su navegador Chrome. Algo es algo, pero seguro que puede llegar un poco más lejos. El sistema alternativ­o que está probando para reemplazar a las cookies se llama FLOC y no sigue a personas, sino que las agrupa en “cohortes” de usuarios con intereses comunes. Es también un tipo de rastreo. Colectivo, pero rastreo. Vamos, un paso más es posible.

El grado de privacidad no puede depender del modelo de móvil que una persona se compre

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain