Sánchez se aferra a las vacunas y los fondos europeos para sortear el 4-M
El presidente se refugia en la agenda internacional tras el fiasco electoral madrileño
Tierra al asunto en Madrid, de nuevo en busca de un “mirlo blanco” que nunca aparece. Reabierta la eterna guerra interna en Andalucía, con la pretensión de que sea la batalla final para relevar a Susana Díaz. Y todos los focos encendidos, de nuevo, sobre una exitosa estrategia de vacunación contra la pandemia y sobre los ingentes fondos europeos como tabla de salvación para la crisis económica. Este es el nuevo tablero de juego de Pedro Sánchez con el que intentar sortear la hecatombe electoral del 4-M en Madrid. Y que no se consolide la percepción de un posible cambio de ciclo político en España.
Sánchez se mantiene encapsulado desde que el escrutinio electoral certificó, el martes por la noche, el alcance de la tragedia socialista en Madrid. Tras hacer implosionar al PSM con las dimisiones de José Manuel Franco y Ángel Gabilondo, a modo de cortafuegos, el líder del PSOE se reunió el jueves de manera telemática con la ejecutiva de Ferraz, donde sí se trasladó el mensaje de que el fiasco electoral madrileño no es extrapolable al conjunto de España, que estos negros resultados no van a condicionar ni alterar el rumbo del Gobierno, y que el mandato de Sánchez se agotará en el 2023 y no antes. Para ello, se puso de nuevo el acento en centrar todos los focos en la estrategia de vacunación y en la reactivación económica que sustentarán los ingentes fondos europeos.
El presidente del Gobierno, así, acudió ayer al palacio de la Zarzuela, junto a sus cuatro vicepresidentas, para presentarle al Rey el plan de recuperación económica, que guiará la ejecución de 72.000 millones de euros de los fondos europeos justo hasta el año 2023. A continuación, Sánchez voló hasta Oporto para participar en la cumbre social y la reunión informal de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea. Una cita a la que lleva su propio plan para acelerar el reparto mundial de vacunas, que pretende ir más allá de la suspensión de las patentes que propone el norteamericano Joe Biden.
Esta cumbre informal europea en la ciudad portuguesa, que se prolongará con una reunión de alto nivel Ue-india, concluirá hoy sin previsión de que Sánchez comparezca ante la prensa para poder evaluar públicamente el escenario que abre la hecatombe electoral socialista en Madrid o la pugna interna reabierta en Andalucía. Y más agenda internacional a continuación, ya que el presidente del Gobierno viajará el próximo lunes a Atenas, para mantener un encuentro bilateral con el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, antes de intervenir en un encuentro económico del Delphi Economic Forum.
Mientras Sánchez se refugia en la agenda internacional, el Gobierno prosiguió ayer desmarcándose del fiasco electoral del PSOE en Madrid. La vicepresidenta primera, Carmen Calvo, insistió en que “no tiene nada que ver” el fracaso en las urnas madrileñas con la gestión del Gobierno o sus alianzas parlamentarias con ERC o Bildu, como alertan algunos dirigentes socialistas críticos. La vicepresidenta reiteró que no hay que hacer lecturas de estas elecciones autonómicas que vayan más allá de Madrid. “¿Si no extrapolamos los resultados de Catalunya, por qué vamos a extrapolar los de Madrid?”, se preguntó, en alusión a la victoria electoral de los socialistas el pasado 14 de febrero en Catalunya, cuando además el Partido Popular quedó como última fuerza en el Parlament, superado por Vox e incluso por Ciudadanos.
En Madrid, entre tanto, quedó constituida la gestora que dirigirá al PSM hasta el congreso regional que se celebrará a fin de año, bajo la tutela de Ferraz y la Moncloa.
“¿Si no extrapolamos los resultados de Catalunya, por qué vamos a extrapolar los de Madrid?”, apela Calvo