Más allá del mueble
Hannun factura 6,3 millones y diversifica con pósters decorativos y la venta de sus artículos de madera reciclada a través de terceras empresas
Desde hace seis años, Joan Álvarez y Maurici Badia lideran la empresa Hannun con el propósito de convertir la marca en un referente europeo del mobiliario sostenible, desmarcándose así de la oferta low cost de Ikea.
El modelo de negocio, nacido en Matadepera y con sede en Castellar del Vallès, se basa en el diseño de los productos y la distribución a través de un canal propio digital. La fabricación se lleva a cabo en una treintena de talleres subcontratados en España y Polonia. En su catálogo se encuentran decenas de referencias de estanterías, mesitas, espejos, módulos... La mayoría están hechos a base de madera reciclada, además de otros productos libres de tóxicos.
Con esta propuesta, la compañía quiere ahora diversificar más allá del mueble decorativo, abrirse a otras categorías como los pósters –ha adquirido la empresa Artesta–, el mobiliario infantil, la iluminación o los productos para el espacio exterior.
Es una apuesta que Hannun ha llevado a cabo desde que salió a cotizar en la bolsa BME Growth, una operación que tuvo lugar en verano del año pasado y en la que la compañía captó ocho millones para financiar su expansión. Desde entonces, Hannun también ha empezado a vender más allá de su plataforma propia. “Realizamos encargos para empresas del sector hotelero y profesionales vinculados al mundo de la arquitectura y el diseño. También hemos empezado a vender en otros marketplaces, como Leroy Merlin, La Redoute o Maisons du Monde”, comenta Álvarez, que ejerce el cargo de consejero delegado.
Desde la salida a bolsa, la compañía también se ha propuesto recortar gastos para acelerar su llegada a la rentabilidad y por eso ha reducido la inversión branding (gestión de marca) así como el equipo de trabajadores en plantilla, que en la segunda mitad del 2022 pasó de 70 a 60 personas.
Habiendo implantado estos cambios, la compañía ha publicado unas previsiones de resultados del 2022. En dicho documento, la empresa pronostica un ebitda (beneficio bruto) negativo de -5 millones, frente a los 3,5 millones del 2021, y también un crecimiento del 55% de los ingresos, al llegar a los 6,3 millones de euros. De este total, Hannun prevé que alrededor de un millón de euros procedan de la firma de pósters Artesta, que ha vivido un fuerte crecimiento. De hecho, la firma se plantea abrir una tienda física de esta marca.
Álvarez destaca la internacionalización de las ventas. “La mitad de los ingresos ya proceden de otros países europeos, como Francia, Alemania, Italia y Portugal”, asegura el fundador, quien añade que la compañía tiene una nave logística en Hungría para responder a los pedidos internacionales.
La compañía cotizada quiere optimizar gastos y ha recortado diez empleos y la inversión en gestión de marca