La eliminación de la T-jove de cartón desborda el servicio de la T-mobilitat
Colas de más de dos horas en los puntos de atención para obtener la nueva tarjeta
Sin tener la T-mobilitat ya no hay manera de comprar una T-jove, el título que permite a los menores de 30 años utilizar el transporte público de manera ilimitada durante tres meses por 40 euros. Lo que es un avance en el despliegue de la controvertida tarjeta de plástico se ha convertido en una pesadilla para los estudiantes y usuarios habituales de la T-jove, soportando colas de más de dos horas en los puntos de atención de la T-mobilitat si quieren obtener el billete al momento.
Las largas esperas son visibles estos días en la estación de Sants, donde ayer abrieron el mostrador a las nueve de la mañana y en media hora ya habían repartido todos los números de atención hasta la hora de comer. No es una escena aislada, se repite también en las céntricas estaciones de plaza Catalunya, Arc de Triomf y más allá. Las colas se multiplican en Granollers, Sabadell, Terrassa... Donde hay un punto de atención (y suman una cuarentena en toda la región metropolitana), hay cola esta semana. Las aglomeraciones se dan incluso en los centros de atención que funcionan con cita previa ya que el de la propia Autoritat del Transport Metropolità (ATM) en la Granvia de l’hospitalet, por poner un ejemplo, no dispone de citas disponibles hasta el mes de mayo. En el de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) de plaza Catalunya y en los del metro de TMB en Lesseps y Torrassa directamente se habían agotado todas las opciones del calendario ayer por la tarde.
El pico de demanda ha coincidido con el inicio del trimestre escolar tras las vacaciones de Semana Santa. Muchos usuarios de la T-jove son estudiantes y acostumbran a hacer coincidir sus tarjetas de validez trimestral con los calendarios de universidades y centros formativos. La rutina del regreso a las aulas se acompaña de la adquisición del billete trimestral y al no poder comprarlo en las máquinas es cuando la demanda de la T-mobilitat ha sobrepasado la capacidad de dar respuesta por parte del servicio de atención. De repente, el mismo personal que durante muchos meses ha estado de brazos cruzados se ha encontrado con infinidad de jóvenes al otro lado del mostrador. Las redes sociales, en las que muchos de los que llevan la T-jove en la cartera se mueven como pez en el agua, se han llenado de amargas quejas.
La ATM reconoce “un cierto repunte de peticiones de atención presencial, especialmente en aquellos que no requieren cita previa”, y se escuda en la falta de previsión de los estudiantes. “Muchos son los que, a principios de año, aún optaron por la opción magnética y han esperado hasta que se han agotado los 90 días del título que había comprado en enero para darse de alta al nuevo sistema de validación sin contacto”, justifican desde la ATM.
Si bien la administración responsable del despliegue de la T-mobilitat se ha caracterizado por el oscurantismo y la falta de comunicación durante mucho tiempo, lo cierto es que esta vez había desplegado una intensa campaña informativa desde finales del año pasado, anunciando de que la T-jove pasaba a estar exclusivamente en la T-mobilitat desde el 15 de marzo. El hecho de que recientemente se haya ampliado la edad máxima de los 25 a los 30 años también ha sumado nuevos usuarios.
La solución que ofrecen los responsables del proyecto es la de pedir la tarjeta a través de internet, que ha sido la fórmula mayoritariamente utilizada hasta ahora. En el último mes, sin ir más lejos, se han registrado 2.815 usuarios diarios a través de la web y 795 de manera presencial. El problema de la vía virtual es que la tarjeta tarda diez días hábiles en llegar a casa y no es una solución válida para los afectados que la quieren usarla al momento. Otra opción que recuerdan fuentes de la ATM es la de darse de alta y cargar con la propia tarjeta integrada dentro del teléfono móvil. En este caso se puede conseguir habilitar el título virtual en apenas unos minutos, aunque dicha opción solo es válida para los usuarios de Android con NFC, los de iphone no lo tienen todavía disponible.c
El abono trimestral ya solo se puede usar con el billete de plástico y ha pillado por sorpresa a muchos usuarios