Milagros en los barrios
En dos barrios de Barcelona, Sant Jordi ha obrado un pequeño milagro. En Sarrià, consiguió que las libreras de La Llibreria de la Plaça montaran su caseta como si no hubiera pasado nada. En enero, la librería se quemó, pero las hermanas Rosa y Maria Bassedas recibieron tanto apoyo del vecindario, que ayer sus carpas ocupaban buena parte de la plaza.
“Una vecina nos ha dejado una parte de su casa para usarla como almacén”, explica Rosa, pletórica
por las muestras de afecto que han recibido. Ahora están con el papeleo y la rehabilitación del local, luchando por abrir pronto. “A ver si antes de verano podemos volver a levantar la persiana de la librería”.
En la plaza de Sarrià se ha consolidado una fiesta descentralizada, donde el vecindario compra los libros, las rosas –en la floristería las envuelven artesanalmente– y acto seguido los postres en la pastelería, donde ayer vendían pasteles con forma de libro, con títulos como KRTU, de J.V. Foix, sobra decirlo.
En el puesto de la librería A Peu de Pàgina, Carme Riera firmaba libros y expresaba su deseo de Sant Jordi: “Que el sueño de Carmen Balcells de convertir Barcelona en capital mundial del libro, Barcelona Latinitatis Patria, se acabe haciendo realidad”.
En otro extremo de la ciudad, en el Poble Sec, el milagro se produjo en un bar. En la calle Bòbila, en septiembre del 2021 Juanpe González abrió el bar La Cañada, frente a la editorial Candaya: “El pasado año montamos un pequeño Sant Jordi en la terraza porque teníamos algunos amigos que publicaban libro, y vinieron tres pequeñas editoriales”.
El éxito animó a otras editoriales a querer apuntarse y este año ya fueron nueve. “Son editoriales pequeñas, que no tienen acceso a los grandes espacios”, continúa Juanpe, que explica que han podido cortar la calle y montar los puestos gracias a la Associació de Comerciants del Poble Sec i el Paral·lel y del distrito.
En un pequeño escenario se sucedieron las actuaciones, como la de “Sergi Felipe, compañero mío de la Banda Municipal del Polo Norte i Tejero”, declara el barman de Terrassa. “Todos son amigos y clientes. En el bar ya tenemos programación cultural, con pequeños conciertos, presentaciones literarias y artes escénicas. La artífice es Sara Serrano, mi pareja, que ha llevado la producción y la coordinación de los actos de hoy”, concluye.
Sant Jordi taumaturgo.c