Tusgsal niega haber expedientado a la conductora que echó a un hombre del bus
Tusgsal, la empresa que opera la línea N1 de bus que hace el trayecto en Barcelona desde la Zona Franca a Trinitat Nova, niega haber expedientado a la conductora que el pasado domingo, de madrugada, expulsó del vehículo a un hombre que no dejó de increparla –dedicándole expresiones sexistas del estilo de “reina” o “guapa”– durante varias paradas. Un joven pasajero de 27 años, Roger Pons, fue el que inmortalizó la escena con un vídeo que posteriormente colgó en las redes sociales y que se viralizó de inmediato.
Fuentes de la empresa explicaron ayer a La Vanguardia que hasta el lunes por la mañana no conocieron los hechos y que, en ese momento, no pudieron hablar con la conductora, que estaba durmiendo al haber trabajado la noche del domingo. Posteriormente, sí que lo pudieron hacer.
A diferencia de lo que publicaron algunos medios, en Tusgsal aseguran que no le han abierto ningún expediente a la trabajadora. Lo que sí han hecho, sostienen, es abrir una investigación para intentar esclarecer lo que sucedió la madrugada del domingo en el autobús. “Iniciamos una investigación a primera hora de la mañana del lunes, cuando tuvimos constancia del vídeo”. Explican que la conductora “está bien” y “continúa trabajando”, y que la empresa está a su lado “para lo que necesite”: “Tenemos unos protocolos internos que velan por el bienestar de nuestros conductores”, añaden esas mismas fuentes.
Admiten que ella “quizás” no actuó “con total perfección”, pero lo justifican alegando que “se puso nerviosa porque había una persona que le estaba diciendo cosas que no eran adecuadas”. Cuentan que los responsables de la compañía ya han hablado con ella sobre este aspecto: “Si te pones en su lugar, puedes entender que en un caso así quizás no actúes bien al 100%”.
Asimismo, no quieren avanzar si tomarán acciones contra el presunto acosador. En estos momentos, añaden, tampoco saben si lo hará su trabajadora.
Esgrimen que las líneas nocturnas “son complicadas”, porque sube pasaje “de todo tipo”, y que por ello acostumbran a poner a conductores en estos trayectos “que están un poco preparados emocionalmente” para lidiar con este tipo de clientes.
Tampoco quieren entrar a valorar si la trabajadora hizo bien o no en abandonar la cabina para echar al hombre que la increpaba. Defienden que es algo que ya han hablado de manera interna con la conductora.
Roger, el joven que grabó la escena, explicó a este diario que ella había “aguantado mucho” antes de tomar la decisión de echar al pasajero, que le había invitado a irse al fondo del autobús y a permanecer callado, algo que este no hizo. El presunto acosador se ha comunicado vía redes sociales con él pidiéndole que retire el vídeo: “Iba muy pasado. Mi mujer se va a enfadar cuando lo vea. Por favor, bórralo”. Incluso le dijo que se trataba de un delito (colgar el vídeo donde él aparece), y que podría tomar acciones legales. Roger, sin embargo, dice haberse asesorado y por ahora va a mantenerlo.