Montserrat fija una tarifa para los extranjeros que visitan el santuario
Los monjes del monasterio de Montserrat cobran desde ayer una entrada de ocho euros a los turistas extranjeros que accedan al atrio, la basílica y el camarín de la Moreneta del santuario de Santa Maria. Si además desean asistir al canto de la Salve yel Virolai, a cargo de la escolanía, el precio del paquete se eleva a 12 euros. Existen diferentes combinaciones de tarifas en función de los espacios que quieran conocer las personas llegadas de otros países. El visitante nacional está exento del pago.
Josep Altayó, director general de L’arsa, la empresa creada por los monjes para gestionar los hoteles, bares, tiendas, museo y servicios de la montaña de Montserrat, explica que se ha tomado esta decisión para controlar mejor el aforo, que se desborda en días y horas punta. “Hemos querido poner orden a las visitas, sobre todo los fines de semana y por las mañanas. Los residentes en
El paquete para acceder al santuario y asistir al canto de la escolanía se eleva a los doce euros
Catalunya o en el resto de España pueden venir libremente, pero les recomendamos que si quieren presenciar el canto de la escolanía o entrar en el camarín de la Virgen, un máximo de 3.000 personas al día, mejor que hagan una reserva por internet”, explica Altayó.
Cabe recordar que otras zonas del monasterio, como el museo de Montserrat, el conjunto de esculturas modernistas al aire libre y el espacio audiovisual, ya eran de pago con anterioridad para todos los públicos, en concreto la tarifa para las tres se eleva a 18 euros. Para el extranjero que quiera acceder a todo se ha fijado un paquete que cuesta 23 euros.
Altayó precisa que en el 2022 un total de 1,6 millones de personas accedieron a la montaña de Montserrat, aunque no se dispone de los datos de cuántos entraron en el santuario. La cifra récord se registró en el 2019, con 2,7 millones, de los cuales cerca de un millón procedían mayoritariamente de Catalunya y en menor medida del resto de España. Estos datos resultan de la suma de los visitantes que llegan a Montserrat a bordo del cremallera, del Aeri o en vehículo. El objetivo de muchos es practicar el senderismo. “Este 2023 creo que estaremos en torno a los dos millones”, calcula Altayó.
Los fondos obtenidos se destinarán al mantenimiento del monasterio y a colaborar en obras sociales.c