El Rey pide que Europa “haga valer su voz” en el nuevo orden internacional
Guterres reclama diplomacia “en lugar de balas” en un vibrante alegato por la paz
La guerra en Ucrania, las crisis migratorias o el cambio climático son desafíos de muy distinta entidad que afronta Europa, y a los que el Rey se refirió ayer en la entrega del premio Carlos V al secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, para pedir que “la democracia, los derechos, la libertad, la igualdad y la solidaridad” sean la bandera de Europa en el mundo. “Europa debe hacer valer su voz en este nuevo contexto de transformación del orden internacional sobre la base de los valores y principios que son su seña de identidad”, destacó Felipe VI.
Todos los años, el Rey vuelve al monasterio de Yuste por estas fechas, para entregar el premio que distingue a quienes contribuyen al proyecto europeo. Del portugués Guterres, destacó sus “incansables esfuerzos” por lograr “más consensos, más comprensión y más voluntades” para afrontar los retos globales, así como su “moderación y sensatez”. Y llamó a “reconstruir la confianza” entre los países miembros de Naciones Unidas y a “reforzar un sistema multilateral” basado en el derecho internacional.
En clave europea, Felipe VI subrayó la necesidad de avanzar hacia una Europa “más libre, más justa y solidaria”, ideales que cobran mayor importancia “frente al horror de la guerra” en Ucrania. “Sin diálogo, sin entendimiento, sin consenso, no encontraremos soluciones duraderas”, advirtió.
En otro ámbito, señaló que la UE debe tomar decisiones que van a condicionar el futuro, y citó “la transición hacia las energías renovables y el desafío humanitario de los refugiados y de los migrantes”. Y situó la presidencia del Consejo de la UE que España asumirá en julio como “una gran oportunidad” para impulsar la relación entre la UE e Iberoamérica.
António Guterres recibió el premio de manos del Rey con un vibrante alegato por la paz y proclamó que “en lugar de balas” es preciso recurrir a los “arsenales diplomáticos” y a la negociación para “resolver pacíficamente” los desencuentros. “Erigir puentes es la única opción”, destacó.