¡Caray con los moderados!
Borja sémper es un político recuperado por alberto Núñez Feijóo para el PP, que ejerce de portavoz de campaña. entró en el partido por Gipuzkoa con 19 años y ha sido concejal en irun y diputado del Parlamento vasco hasta hace tres años. Faltar un día a clase en la universidad le salvó de ser asesinado por eta. está casado, tiene tres hijos y ha escrito varios libros, incluido un poemario. se marchó de la política “porque hay un clima general que no es el que a mí me gusta”, así que se fue a casa y entró a trabajar en ernst & young.
resumo su currículum, para resaltar su condición de político dialogante, moderado, comprometido y culto. Por eso me ha extrañado su desconsideración hacia los jóvenes para deslegitimar una propuesta del Psoe a fin de que las personas
Borja Sémper ha criticado que Sánchez pague vacaciones a bigardos de 28 años
de 18 a 30 años dispongan de un descuento del 50% en el interrail europeo. sémper ha criticado que sánchez “pague vacaciones a bigardos de 28 años”. el personaje resulta ilustrado, hasta el punto de que ha utilizado un término que no es de uso común para llamarles holgazanes. era bastante utilizado en el siglo de oro, pero resulta difícil de oír en la actualidad.
inicialmente, servía para referirse a ciertos religiosos que eran seguidores del sacerdote medieval belga lambert le Bègue. Precisamente de este personaje procede el vocablo begardo, que con los años se transformó en bigardo. el Diccionario de la lengua española especifica que significa vago u holgazán, pero también vicioso y de vida licenciosa. Hay una tercera acepción: “persona alta y corpulenta”, pero resulta evidente que no es el caso.
Un descuento para que los jóvenes se muevan en tren por europa no resulta ningún disparate. Viajar ilustra y es un aprendizaje de tolerancia. esta generación de jóvenes muy preparados que ganan sueldos precarios debería merecen más atención y empatía. llamarles bigardos es una mezquindad. la sensación es que la política española está tan enfangada que, cuando alguien baja al barro, se embrutece con solo acercarse. y los presuntos moderados pierden el humor y el criterio tan pronto huelen el lodo.