La Vanguardia

San Isidro, álbum de fotos de la unidad

- Pedro Vallín Madrid

La vida adulta consiste en firmar un pacto con la realidad y conjugar lo deseable con lo posible de forma no cínica. Lo expresó el novelista y premio Princesa de Asturias de las Letras Richard Ford en el desenlace de su novela Canadá (Anagrama, 2013): “Tendrás una oportunida­d mejor en la vida, de sobrevivir­la, si toleras bien la pérdida; si te las arreglas para no ser un cínico en todo aquello que ella implica; si te supeditas, como sugirió Ruskin, al mantenimie­nto de las proporcion­es, a enlazar las cosas desiguales en un todo capaz de preservar lo bueno, aun cuando haya que admitir que lo bueno no es a menudo fácil de encontrar”. En esas está la unidad de la izquierda, y el paseo de la vicepresid­enta Yolanda Díaz ayer por la madrileña pradera de San Isidro fue una demostraci­ón de esa voluntad y de sus límites.

La vida se parece poco a la épica medieval, así que, más que a la boda roja de Juego de Tronos , a la que aludía sagazmente hace bien poco en estas mismas páginas Iván Redondo, el momento de la izquierda se parece a una boda de divorciado­s. Por tanto, sus desafíos tienen más que ver con el encaje de bolillos de organizar las mesas para evitar agravios y pendencias que con una catarsis de sangre y poder. Díaz se dejó querer o se quiso querer por las dos listas enfrentada­s en las elecciones de Madrid, la de Más Madrid y la de Unidas Podemos, sin que estas tuvieran contacto entre sí y con la prevención de que ambas formacione­s estuvieran al corriente de la visita a su adversario.

Entre el primer encuentro con los candidatos madrileños de la lista de Unidas Podemos, Alejandra Jacinto y Roberto Sotomayor –acompañado­s de otros cargos de Podemos, como Lilith Verstrynge y Carolina Alonso–, y el segundo, con las candidatas de Más Madrid, Mónica García y Rita Maestre –secundadas por Eduardo Rubiño, Carla Antonelli e Íñigo Errejón–, medió una hora larga en la que, amparada por la sombra beatífica de los pinos, Díaz hizo tiempo con decenas de fotos más, las de los chulapos y chulapas de toda edad y condición que solicitaro­n ser inmortaliz­ados junto a la vicepresid­enta.

Su llegada a la ermita del santo amagó noticia. Con la rampa de acceso repleta del paisanaje castizo –lo dejó dicho Víctor Manuel: “Hay una empinada cuesta para llegar a la ermita y las campanas repican, los romero van a misa”–, unos policías nacionales a caballo y cuatro motoristas de la policía local abrían las aguas de la marea humana, pendiente arriba, para el paso de un coche oficial negrísimo. La prensa que esperaba ante el templo se volvía perpleja ante semejante boato para el paso vicepresid­encial. Falsa alarma: el vehículo pasó de largo. El palio

Más que una ‘boda roja’, la unidad de la izquierda es una boda de divorciado­s: el reto es organizar las mesas

motorizado era para el cardenal Carlos Osoro, que oficiaba la misa popular en la pradera. La vicepresid­enta llegó andando, con modesto séquito, como suele hacer.

La logística del paseo fue tediosa, como lo son todos los partidos que aspiran a empate, es decir, como lo son los actos sociales donde el objetivo, antes que agradar a todos, es no importunar a nadie. Pero los propósitos para el álbum de fotos –que es la única posteridad posible de una boda que no se haya torcido en tragedia– quedaron colmados a gusto de todos. Eso sí, como en los banquetes, la gestualida­d evidenció que hay familia pobre y prudente –Unidas Podemos, que lejos de soñar con la hegemonía, aspira a ser llave electoral en Comunidad y Ayuntamien­to–, y familia acaudalada y risueña –Más Madrid, que el 28-M puede ratificar su liderazgo incluso frente al PSOE–. Que en las bodas todos comemos y bailamos lo mismo, pero al volver a casa, cada cual reencuentr­a su vicisitud o su sordidez.

 ?? Dani Duch ?? Íñigo Errejón, Mónica García, Yolanda Díaz, Rita Maestre, Carla Antonelli y Eduardo Rubiño
Dani Duch Íñigo Errejón, Mónica García, Yolanda Díaz, Rita Maestre, Carla Antonelli y Eduardo Rubiño
 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain