La primera fiesta
La noche del domingo, los jugadores celebraron la Liga en una discoteca y la directiva y el cuerpo técnico, en un restaurante
El autobús con la directiva barcelonista liderada por el presidente Joan Laporta partió desde el Camp Nou hasta el RCDE Stadium con un optimismo moderado pero con buenas vibraciones. Todo se transformó en alegría desatada cuando se confirmó el triunfo barcelonista. Lo suficiente como para que el presidente bajara a los vestuarios para celebrar su primera Liga en esta segunda etapa bañado en cava mientras bailaba con los jugadores. “No regresó a Barcelona en el autobús con el resto de la directiva que entonó varias veces el ser del Barça és el millor que hi ha. Tuvo que pasar por su casa para cambiarse”, cuentan testigos de la primera fiesta de la directiva y del cuerpo técnico para festejar un título que se celebró en el restaurante Jacqueline. El presidente, de los últimos en abandonar el local pasadas las cuatro de la mañana, eligió ponerse la camiseta que lucía el equipo con el lema La Lliga és nostra, el futur també.
A la fiesta también acudieron otras personalidades destacadas del entorno barcelonista e invitados especiales como los cómicos argentinos Jero Freixas y su mujer, Jose de Cabo que han desembarcado en Barcelona con su
La plantilla festejó el título en un reservado de una discoteca a la que también fue Neymar
obra Una pareja real.
También se unieron los familiares más directos de la directiva como por ejemplo los hijos del vicepresidente deportivo Rafael Yuste (que fue de los primeros en marcharse sobre las dos de la madrugada, igual que el vicepresidente económico Eduard Romeu) o los de Xavi Puig, responsable del fútbol femenino.
La directiva, algo supersticiosa, no avisó hasta el descanso del partido de Cornellà al ya prevenido restaurante de que irían a celebrar la Liga allí. Tampoco pidieron un reservado. Prefirieron mezclarse con los comensales que les felicitaron por la consecución del título.
Las copas sustituyeron la comida porque ya habían cenado en el palco del RCDE Stadium mientras que el cuerpo técnico y Xavi Hernández cenaron de camino a la ciudad deportiva el clásico pack que los campos preparan siempre para el equipo visitante. Por ser el día en el que lograron conquistar su primera Liga desde el banquillo, también abrieron la puerta a los botellines de cerveza. Antes de dirigirse a la fiesta de la directiva, Xavi pasó por el domicilio de su amigo y empresario Alberto Boix Lafuente, que entre otros restaurantes gestiona Can Ferran, uno de los puntos neurálgicos de los ágapes barcelonistas. Allí festejó la Liga con su mujer, Núria Cunillera, su representante Arturo Canales y otros amigos. No faltó de nada en el encuentro familiar. Incluso unas reproducciones del trofeo de la Liga en miniatura. Después el técnico se dirigió a la fiesta de la directiva a la que se unió a la 1.30 de la madrugada. Celebró la Liga con el presidente y su cuerpo técnico. Pero sobre todo con su amigo y miembro de la dirección deportiva, Jordi Cruyff, que todavía no ha decidido si renovará su contrato. Ambos abandonaron juntos el recinto pasadas las tres de la madrugada en taxi siguiendo los pasos de Mateu Alemany.
¿Y los jugadores? Celebraron la Liga hasta pasadas las seis de la madrugada en un reservado de la discoteca Carpe Diem. No se hicieron fotos en público y cenaron sushi. Se unió el exblaugrana Neymar, baja por lesión. El brasileño aterrizó la misma tarde en Barcelona. Antes de acudir a la discoteca, la plantilla celebró el título con la afición en la ciudad deportiva. El último en salir fue Jordi Alba, que quiso tener su momento en solitario. Saludó a la afición y se besó el escudo de la camiseta.c