ERC afila su campaña electoral a costa de Jxcat
Esquerra agita la idea de pactos entre posconvergentes y PP
La de Esquerra no está siendo una campaña como algunas anteriores, cuando ignoraba a Junts para centrar sus ataques en el PSC. Incluso, antes, en Ciudadanos. Oriol Junqueras abrió el fuego al inicio de campaña. El resto de cargos y aspirantes de Esquerra se han subido al carro, pero gracias a declaraciones de algunos de los candidatos posconvergentes, que en su opinión son un sinsentido. Se sirven de ellas para afilar la campaña a nivel nacional.
Las de David Torrents, secretario de organización de Jxcat y alcaldable por Badalona, han sido las últimas. En una entrevista en Badalona Comunicació, afirmó que si tuviera que escoger entre el candidato de ERC, Àlex Montornès, y el del PP, Xavier García Albiol, preferiría al segundo.
Aunque no sostenga, en todo caso, que daría sus votos a Albiol, ERC replicó Torrents. Marta Vilalta, secretaria general adjunta del partido, afirmó que “votar a Trias en Barcelona es votar al PSC; votar a Junts en Badalona es regalar la alcaldía a García Albiol”.
Ha habido más declaraciones de cuadros de Jxcat que los republicanos han llevado a su terreno de juego. Victoria Alsina, exconsellera y número cuatro en la lista de Xavier Trias, afirmó que hay un “feminismo que impera que es un poco dogmático” vinculado a la “izquierda populista”.
La respuesta le llegó en el acto de campaña de Mollet. La secretaria general de ERC, Marta Rovira, defendió la política feminista de su Govern y aprovechó para presumir de 5.791 de mujeres en sus listas electorales en toda Catalunya, que implican un 49% de entre todos sus candidatos. Tània Verge, consellera de Igualtat i Feminismes, fue más dura y reprochó a Alsina su “soberbia colosal”.
A Esquerra también le han venido bien afirmaciones del alcaldable de Barcelona, que mantuvo que construir el tranvía afecta más al cambio climático que los coches. O aún más: que los coches “no tienen nada que ver” con el cambio climático.
Ayer, Ernest Maragall, alcaldable en Barcelona por ERC, aprovechó las palabras de Torrents y alertó del “juego de cálculo” de los alcaldables del PSC, Jaume Collboni, y de Junts, Xavier Trias, para gobernar con el apoyo del PP.
Así las cosas, los republicanos se han visto autorizados para no reducir sus reproches en el PSC, una vez Junqueras abrió el camino el jueves pasado, cuando aseguró que la lista de Trias, está “repleta de aquellos que abandonaron al pueblo” antes del 1-O.
Sea como fuere, todo esto muestra una vez más la diferencia de modelos políticos entre dos partidos que hasta octubre fueron socios en el Govern y que, aunque cada municipio tiene su particularidad, los pactos por la línea independentista pueden ser menos probables que los pactos del eje izquierda-derecha.