Adamo rompe el mercado de internet en la Catalunya rural
El grupo invierte 19 millones con ayuda de fondos europeos
Adamo, un operador de fibra óptica propiedad del fondo francés Ardian, ha roto el mercado de internet en las zonas rurales de Catalunya: con apoyo de los fondos Next Generation de la UE está realizando una inversión de 19 millones de euros en crear una red de fibra óptica que ofrece 1.000 MB de velocidad y da cobertura ya a 700.000 viviendas. De ellas, 300.000 están en la zona metropolitana de Barcelona y el resto disperso, en cerca de 160 municipios, en muchos de los cuales hasta ahora solo había banda ancha de Movistar, o incluso ninguna.
Según su consejero delegado, Martin Czermin, el esfuerzo de la empresa responde a “la importancia que siempre ha tenido Barcelona y Catalunya para la compañía: aquí están nuestra raices”.
Adamo tiene su sede en el 22@ de Barcelona y cuenta con una plantilla de 320 personas, la mayoría en Catalunya. La firma fue creada en el 2007 por el fondo sueco EQT, que la vendió en el 2021 al fondo de capital riesgo francés Ardian, por un importe que fuentes del mercado cifraron en unos 1.200 millones de euros.
Adamo ha apostado por hacerse un hueco en España como operador de áreas rurales, con el apoyo de los fondos europeos: se ha adjudicado las ayudas de los fondos PEBA en 17 provincias, por un importe de 98 millones de euros a los que añadirán una inversión adicional de 45 millones con fondos propios. El grupo captó también anteriormente las ayudas del Programa Único, de manera que en total ha movilizado una inversión de 300 millones, tanto públicos como propios, para llevar la fibra a 950.000 viviendas ubicadas en zonas rurales de 24 provincias.
En Catalunya el grupo ha captado 13 millones en ayudas europeas (9,7 millones para Tarragona y 3,2 millones para Girona), a los que sumará una inversión con fondos propios de 6 millones.
Catalunya, explicaron portavoces del grupo, concentra una cuarta parte de las viviendas cubiertas por la red de Adamo, además de 54.000 clientes. Una buena parte de ellos están en la misma Barcelona, donde comenzó cableando el área del 22@. Hoy una de sus mayores apuestas es la Cerdanya, donde han cableado ya 15 de los 17 municipios, con 8.000 viviendas con acceso a su red. La operadora patrocina incluso la estación de esquí de La Molina y tiene 35.000 viviendas cableadas en el Pirineo catalán.
La red de Adamo ha permitido elevar la cobertura de fibra óptica al 95% de los hogares catalanes, “una infraestructura que es vital para mantener la actividad económica de las zonas rurales, evitar su despoblamiento y garantizarles unos servicios públicos y privados de calidad”, señaló Czermin
La firma barcelonesa, propiedad del fondo francés Ardian, tiene ya 54.000 clientes en 160 municipios