Sean Penn y la salud mental de un hombre al límite
El actor sale airoso en la piel de un paramédico desbordado en ‘Black flies’
Sean Penn mantiene desde hace unos años una relación complicada con el Festival de Cannes. Si bien como director su thriller, El juramento (2001), recibió una cálida acogida, la crítica le machacó tanto con Diré tu nombre en 2016 como Flag day en 2021, un drama basado en hechos reales coprotagonizado junto a su hija Dylan. Ahora asoma de nuevo por la Croisette con Black flies en calidad solo de actor, una película a competición dirigida por el francés Jean-stéphane Sauvaire con la que intenta redimirse en la piel de un veterano paramédico que enseña la realidad del oficio acompañando al principiante Ollie Cross
(Tye Sheridan) por las calles violentas de Nueva York mientras van en ambulancia al rescate de personas sin hogar, con enfermedades mentales, mujeres maltratadas o latinos heridos en peleas de perros. Ambos actores estuvieron preparándose a conciencia trabajando con el servicio de bomberos y de urgencias de Los ángeles,y el resultado merecería recompensa. La película está basada en la novela homónima de Shannon Burke y pone el foco en la salud mental. Pero no solo la de los pacientes que atienden, sino la suya propia, ya que estos profesionales van desbordados y viven situaciones al límite sin las condiciones adecuadas. “El 90 por ciento de lo que mostramos en el filme corresponde exactamente a la realidad”, manifestó un serio Penn. “Sean y yo estuvimos con profesionales que hacían turnos continuados de 36 horas”, resaltó Sheridan, un actor que se entrega al máximo en un personaje muy exigente. Por su parte, el director señaló que la salud mental “es un verdadero problema” en Estados Unidos, especialmente para los paramédicos, “que afrontan una gran violencia”. Tanta, que hay “muchos suicidios en esta comunidad porque es muy difícil mentalmente trabajar así”.
En su comparecencia ante los periodistas, Penn se refirió a otros asuntos de actualidad, como la huelga de guionistas de Hollywood, a los que dio su apoyo. “La industria ha estado arruinando a los guionistas y actores desde hace mucho tiempo. Hay mucha gente en este sector que no trabaja como le gustaría y a los que no se les paga como se debería”.
El actor y director, que en el Festival de Berlín presentó Superpower, su documental sobre el presidente de Ucrania, hizo hincapié en que hay muchos nuevos conceptos preocupantes alrededor del cine, como el uso de la inteligencia artificial, que tildó de “obscenidad humana”. Black flies no ha obtenido el respaldo de la crítica, pero sí ha habido comentarios positivos respecto al trabajo de Penn. ¿Será esta su esperada reconciliación con Cannes?
“La industria ha estado arruinando a los guionistas y actores desde hace mucho tiempo”, manifiesta el intérprete estadounidense