Un bellísimo último baile
El Liverpool y el Manchester City firman un partidazo en el último enfrentamiento entre Klopp y Guardiola en la Premier; el Arsenal se coloca líder
Por momentos sonó el heavy metal que desprende el Liverpool. En otros, una melodía armoniosa al comp·s del ballet que irradia el Manchester City. Jürgen Klopp y Pep Guardiola interpretaron bajo la lluvia de Anfield su último baile en la Premier, la enésima oda al fútbol de una rivalidad histórica que finalizar· con la salida del alem·n del Liverpool al final del curso. Como si se tratara de un guiño hacia los dos técnicos, el resultado no deparó vencidos y vencedores, sino un empate que hace honor por igual a la gran aportación de ambos al fútbol inglés desde el 2016. El reparto de puntos, tras los goles de Stones y Mac Allister, sonríe al Arsenal, que se coloca líder empatado con el Liverpool y con un punto m·s que los cityzens.
A estas alturas, todos sabían el guion del partido: la eterna batalla entre la asfixiante presión red y la posesión skyblue. De primeras impusieron sus virtudes los visitantes. Los locales, con bajas clave, despertaron con dos tentativas de Núñez. Parecían hacerse con la manija los de Merseyside hasta que llegó el gol del City, de Stones en una jugada ensayada en un córner. Aké bloqueó a Mac Allister y el inglés remató el centro de De Bruyne al primer palo. Reaccionó el Liverpool a base de intensidad, pero el City enfrió el duelo y el resultado hasta el descanso.
El Liverpool encontró el premio del gol en la primera jugada de la segunda parte gracias a un error de Aké, que dio un pase atr·s corto a un Ederson que cometió un penalti claro sobre Núñez. Mac Allister superó desde los once metros al brasileño, sustituido después por lesión. Con el tanto, volvió la apisonadora red. Salah, que estaba entre algodones, salió al campo y en su primera acción creó un mano a mano que malogró Luis Díaz. Ortega salvó después el remate franco de Núñez.
Para entonces, el partido ya estaba sin control, en parte por el cambio de De Bruyne. Como si se tratara de un homenaje, Guardio
Stones inauguró el marcador en una jugada ensayada en un córner y Mac Allister empató de penalti
la se encomendó a la locura que tanto le gusta a Klopp. Las llegadas se sucedían, sobre todo las del Liverpool ante un City sin noticias de Håland. Quansah provocó otra parada de Ortega. Foden, de rebote cómico, se topó con el larguero y Doku chutó al palo, poco antes de impactar con los tacos en el pecho de Mac Allister en una jugada que pudo significar el segundo penalti red. Al final, un empate y un abrazo icónico entre Klopp y Guardiola tras su 23.º duelo en Inglaterra. El balance es de 8 empates, 8 triunfos del Liverpool y 7 victorias del City a la espera de un posible epílogo en la FA Cup. ●