Los secretos del auge de las gasolineras ‘low cost’ en Almería
Las gasolineras de bajo coste proliferan en la provincia, con rebajas de hasta un 10% por litro
Las estaciones de servicio de bajo coste ofrecen gasolina un diez por ciento más barata por litro
Reducir los costes, estar disponible todo el día o buscar suelo barato, formas de ofrecer gasolina low cost
Las gasolineras baratas, también conocidas como ‘low cost’ han logrado colonizar el panorama de los carburantes, también en la provincia de Almería.
El último ejemplo del auge de estas estaciones de servicio está en la propia capital, donde se puede comprobar, de solo un vistazo, por dónde pasa el éxito de cadenas que, como Plenoil o Petroprix, se han convertido en las mejores aliadas de los conductores que buscan, ante todo, el ahorro a la hora de repostar.
¿Recuerdan las cadenas de panaderías ‘low cost’ que proliferaron hace unos años en las ciudades? A gran escala y salvando las distancias, uno de los secretos de las gasolineras de bajo coste es compartido con lese tipo de pastelerías: situarse cerca de estaciones de servicio consolidadas y de primeras marcas.
Ese es, sin lugar a dudas, uno de los movimientos más acertados de cadenas como Plenoil. Un paseo por la capital basta: una gasolinera junto a otra de Repsol en Sierra Alhamilla; otra junto a otra de Repsol en la Avenida del Mediterráneo (frente al Pabellón Rafael Florido) y, en el más reciente movimiento, no una, sino dos gasolineras junto a una estación de servicio de BP junto al cementerio de Almería.
Así, a escasos metros de gasolineras que ofrecen combustible a un precio mayor, es probable ‘robarle’ clientes a las estaciones de servicio ofreciendo los bajos precios que caracterizan a cadenas como Plenoil o Petroprix.
Con esa estrategia y gracias a los precios más bajos del mercado, Plenoil conseguía en 2022 superar su previsión de ventas y alcanzar un total de 692 millones de litros servidos a los vehículos españoles.
El pasado mes de febrero, Plenoil contaba con más de 150 gasolineras repartidas por todo el país. Y la expansión no parece frenarse.
Por si fuera poco, la tendencia es opuesta en las de las grandes cadenas.
Así, mientras estas tienden a cerrar puntos de venta, las nuevas aperturas siempre están protagonizadas por gasolineras relacionadas con supermercados, estaciones de servicio automatizadas y, en definitiva, puntos de venta ‘low cost’. Y Almería es un buen ejemplo de ello.Sin ir más lejos, en 2020 Repsol y Cepsa cerraban el año bajando la persiana de forma definitiva en medio centenar de gasolineras, mientras proliferan y vencen las que siguen el formato de bajo coste en toda España.
El secreto del precio
No obstante, por muy cerca que Plenoil ponga sus gasolineras de las de marcas como Repsol y BP aún queda por responder una pregunta: ¿Por qué su producto es tan barato respecto al de las primeras marcas?
La primera respuesta es obvia a simple vista: limitan sus costes a los exclusivamente necesarios.
No en vano, se trata de estaciones de servicio automatizadas en las que la clientela no necesita asistencia de empleado alguno: se paga con tarjeta junto a la manguera de repostaje y, en caso de pagar en efectivo, un cajero automático permite a cada conductor ejecutar por sí mismo la operación. A pesar de ello, en algunas gasolineras sí hay personal en determinados horarios.
Además, al no necesitar personal y tener una gasolinera automatizada, su horario de apertura es tan amplio como las 24 horas de los 7 días de la semana, frente a otras estaciones de servicio que, por su necesidad de personal, cierran por la noche (o abren con horario nocturno, pero invirtiendo más en personal).
Por si fuera poco, las gasolineras de bajo coste solo ofrecen eso, gasolina a bajo coste. Carecer de un supermercado o de otros productos también abarata costes e inversión.
Además, ofreciendo el mismo producto: a pesar de la leyenda urbana que señala que es un combustilbe más barato por ser peor, lo cierto es que es el mismo. Así lo afirmaba José Rodríguez de Arellano, CEO de Plenoil, en ABC: “Es el mismo”. La Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) es el único organismo autorizado para suministrar carburante en España, que sirve el mismo combustible para todas las marcas.
La diferencia (y esto sí influye en el precio) está en los aditivos, esas sutancias químicas que se añaden al carburante para añadirle cualidades a la gasolina (difíciles de demostrar, no obstante). Es ahí donde las cadenas de gasolineras ‘low cost’ logran rebajar su precio.
Y aún hay otro factor que explica el bajo precio (de media, un 10% menos por litro): el ajustadísimo margen de beneficio de estas cadenas de gasolineras que, para apostar por el volumen como caballo ganador, minimizan todo lo posible la rentabilidad que le sacan a cada litro de combustible. En suma, todo hace que las ‘low cost’ colonicen el sector de las gasolineras. También en Almería.