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Endesa y la economía circular
La eléctrica obtendrá nuevos productos del funcionamiento de su térmica
La terminal que Endesa tiene en el puerto exterior ferrolano cerrará el año con 4,9 millones de toneladas de carbón desembarcadas, consolidando su papel como motor de la actividad del sector marítimo. Las obras de adaptación y reforma de la central pontesa, que se alimenta del mineral que se desestiba en las instalaciones de Caneliñas, garantizan que la eléctrica seguirá desempeñando ese rol como uno de los actores principales del Puerto, ya que supondrán la prolongación de la vida útil de la térmica durante al menos otras dos décadas. Pero además, van a implicar que la compañía mueva nuevos tráficos en los muelles ferrolanos, el de los subproductos derivados de la actividad de generación en As Pontes.
La compañía espera que surjan nuevas oportunidades de desarrollo de negocio con los productos de la combustión y desulfuración de la central, pudiendo generar otros tráficos tanto de entrada como de salida del puerto de Ferrol, asociados a los dispositivos de desulfuración y de desnitrificación que Endesa está instalando en la central de As Pontes. Así, cada una de las dos desulfuradoras que tendrá la nueva central precisará para su normal funcionamiento de caliza y producirá yeso. Este tendrá calidad eurogypsum, por lo que podrá ser empleado en el sector de la construcción.
Por otro lado, Endesa también promoverá que el sulfato amónico derivado de la depuración de efluentes, un producto con ca- lidad comercial, se emplee como fertilizante agrícola.
La compañía profundiza de esta manera en el concepto de economía circular y el aprovechamiento de los productos de la combustión y de la desulfuración.
Endesa recuerda que la relación con el Puerto ferrolano viene de lejos. En 1983 la compañía recibió los primeros barcos autodescargables, que portaban briquetas de carbón polaco. No obstante, no sería hasta 1990 cuando la eléctrica empezase a valorar la posibilidad de implantarse en el muelle de Ferrol, mediante la construcción de una terminal, debido a la mayor demanda de combustible importado para mejorar la eficiencia ambiental de la central térmica. La primera terminal, ubicada en los muelles interiores, se puso en marcha en 1995 y la actual, en el puerto exterior, en el 2009, para atender la demanda de mineral que precisaba la térmica.
Estas instalaciones tienen capacidad para mover más de cinco millones de toneladas al año; dispone de una capacidad de almacenamiento de 300.000 toneladas y en ella se pueden descargar buques de hasta 220.000 toneladas, si bien la mayoría portan alrededor de 165.000 toneladas de carbón en sus bodegas.
Hito histórico
Desde las instalaciones del puerto exterior en Prioriño se hacen diariamente unos ochocientos viajes en camión hasta As Pontes, transportando más de 20.000 toneladas de hulla, lo que se traduce en más de 150.000 viajes al año con una flota que ronda los 120 vehículos. Fue precisamente en esta terminal donde Endesa alcanzó un hito histórico: haber traído a Ferrol un millar de cargamentos de carbón.