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Una apuesta por la seguridad de los ciudadanos gallegos desde todos los frentes
La administración autonómica sigue reforzando los mecanismos y los equipos humanos que permitan respuestas eficientes frente a cualquier posible emergencia
Por tierra, mar y aire. Todos los esfuerzos necesarios para certificar la seguridad de Galicia están al servicio de los ciudadanos de la comunidad. La Axencia Galega de Emerxencias se multiplica para solucionar los problemas que puedan surgir en cualquier punto de nuestra geografía. Dispositivos humanos y físicos, formación, tecnología, información a través de las redes… Los tentáculos de esta completa red tratan de cubrir todos los campos posibles.
Pero cualquier esfuerzo es necesario cuando hablamos de seguridad. Las cifras hablan por sí solas. Según los datos publicados el pasado mes de junio por el Centro de Atención ás Emerxencias (CAE) 112 Galicia, este servicio atendió 237.973 demandas durante el año 2017, lo que supuso un 7 % más que en el año anterior. Los datos que maneja la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) muestran que las llamadas para asistencias sanitarias son las que presentaron mayor volumen, un 27,62 % del total; seguidas de las incidencias por animales, entre las que cabe destacar los avisos de enjambres de avispas velutinas, con 25.240 alertas, más de un 48 % por encima del año anterior.
En los últimos cuatro años, la administración gallega ha aumentado sus esfuerzos con el objetivo de mejorar las prestaciones y seguir adaptando la seguridad a los nuevos tiempos. Un ejemplo de ello es la puesta en marcha del nuevo Centro Integrado de Atención de Emerxencias, inaugurado el 19 de abril en A Estrada. Con más de 4.600 metros cuadrados construidos y con la modernización y la integración de los
servicios de emergencia como bandera, este centro se ha convertido en un auténtico referente en Europa.
El camino realizado por los responsables del centro ha sido continuo. Después de su puesta en marcha se fueron integrando poco a poco al nuevo centro los primeros servicios de emergencias. En julio del 2018 se incorporaba la Policía Autonómica, mientras que tres meses después se asentaban en él los de Urxencias Médicas 061.
La mejora tecnológica ha sido una constante durante estos meses. Los avances instalados en un primer momento fueron dando paso a otros realmente interesantes que, además, se fueron incorporando de forma sencilla. Entre ellas, destacan la mejora en la geolocalización de llamadas o en la atención a las personas con minusvalías auditivas o de fonación. No son las únicas. Una colaboración con el Centro Tecnolóxico de Automoción de Galicia (CETAG) permitió desarrollar la inclusión del sistema eCall, que permite la llamada automatizada desde un vehículo tras un accidente de tráfico enviando datos de localización e identificación.
GRANDES EMERGENCIAS
Los dispositivos no solo están preparados para las pequeñas emergencias que puedan surgir en el día a día. Existen equipos preparados y al servicio de cualquier gran emergencia en la comunidad. El Grupo de Apoio Loxístico (GALI), una unidad dependiente de la Axencia Galega de Emerxencias, tiene como objetivo el soporte de material en las intervenciones de grandes emergencias. Sus actuaciones consiguieron tener gran trascendencia en momentos clave de los últimos años. El incendio del catamarán de O Grove, la explosión de la pirotecnia de Tui, el descarrilamiento del tren en Porriño o los incendios forestales son un ejemplo de ello.
Desde la Xunta resaltan que la dotación de material para este grupo de apoyo fue algo que se está haciendo de manera constante. El resultado es un catálogo de medios a disposición de la gestión de las emergencias que es un auténtico referente en toda la comunidad. De esta forma, en los últimos cuatro años fueron adquiridas tres nodrizas de 25 litros cada una para el apoyo de incendios forestales en épocas de sequía o la creación de la unidad de drones para intervenciones en emergencias. También des- taca la compra de una bomba de gran caudal con capacidad de succión de 15.000 litros por minuto o la dotación de varios vehículos dedicados a puestos de mando avanzados.
VOLUNTARIOS
Otra de las patas importantes del entramado de seguridad de la comunidad son las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil (AVPC), que durante este año registraron su máximo histórico al alcanzar las 233 entidades activas tras la incorporación de los grupos de Campo Lameiro y Ribeira de Piquín, lo que equivale a casi 4.600 voluntarios distribuidos por las cuatro provincias gallegas.
Estas agrupaciones, centradas especialmente en actividades de prevención, autoprotección, desarrollo de grandes eventos y apoyo a los cuerpos profesionales en la intervención directa, comenzaron a funcionar en los años 90 como un primer nivel de intervención y atención a la población en aquellos lugares en los que no existían servicios profesionales. A partir de ahí se fue creando una amplia
El 112 Galicia atendió durante este año 237.973 emergencias
En Galicia hay equipos preparados para actuar ante grandes alertas
red de voluntarios, que fue mejorando a lo largo de los años gracias a la dotación de material y a la formación de sus miembros. Su colaboración es inestimable. Ellos son, en muchas ocasiones, los primeros en llegar ante una situación de urgencia. Por ello la Xunta ha redoblado sus esfuerzos apoyando con más recursos estos dispositivos.
¿Y EL FUTURO?
El objetivo es claro: mejorar los servicios y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos. Para ello, la Xunta no solo tiene previsto avanzar en las líneas abiertas actualmente. Sobre la mesa tienen algunos planes novedosos con los que seguir avanzando. Además de incrementar la dotación presupuestaria para el GALI o la Axega, o continuar trabajando en la integración de los servicios de emergencia en el 112, la administración tiene previsto elaborar un plan de comunicación autonómico en la gestión de las emergencias. Y es solo el principio.