Los casos en los centros de mayores se duplican en sólo dos semanas
● La FOAM teme los “devastadores” efectos de la tercera ola y critica que Salud no haya atendido sus recomendaciones
La tercera ola de la pandemia está volviendo a inundar los geriátricos andaluces en medio del proceso de vacunación. En las últimas dos semanas, el número de centros de mayores con residentes contagiados por el SARS-CoV-2 ha duplicado su cifra. El temor reinante entre los gestores de las residencias andaluzas temen que los efectos del Covid-19 en este tercer pico supere al de las dos olas anteriores. “Ojalá nos equivoquemos”, dice Martín Durán, presidente de la Federación de Organizaciones Andaluzas de Mayores (FOAM).
Sin posibilidad aún de que haya podido inmunizarse a la población de los geriátricos, pese a que los residentes y el personal que los atiende se encuentren en el primer grupo que está recibiendo las vacunas, el coronavirus sigue haciendo estragos entre la población más vulnerable.
La Consejería de Salud prevé completar la vacunación en las residencias el 4 de febrero. La inmunización efectiva, sin embargo, no llegará hasta unos diez días después. Estos centros asistenciales estarán expuestos a la enfermedad –y por tanto a las muertes– hasta no antes de mediados de febrero, si es que el cronograma del plan de vacunación establecido por la Consejería de Salud puede mantenerse con la existencia de los actuales brotes.
En este momento hay 111 residencias con personas contagiadas, según los datos de la Consejería citados por la FOAM, lo que supone un 16,5% del total de las 673 residencias que hay en Andalucía. En dos semanas, el número de centros con contagios ha aumentado en 78 –el doble–, se han producido 62 fallecimientos, el número de contagios ha aumentado en 481 –prácticamente el doble– y la tasa de letalidad ha aumentado en un 0,35%.
De seguir evolucionando así, explica Durán, los efectos de la tercera ola pueden ser “devastadores”. La FOAM lamenta que la Consejería no haya atendido sus recomendaciones en relación a la protección de las residencias y que, como consecuencia, se pueda repetir o empeorar los “nefastos” datos de las olas anteriores.
“Alertábamos que, para evitar la proliferación del virus, era de vital importancia apostar por la evacuación de los contagiados”, anulando la transmisión al “resto de residentes y trabajadores”. Para la FOAM, los protocolos seguidos de sectorización y medicalización de centros hechos hasta ahora no han tenido el “efecto deseado”.