Urbanismo da luz verde a la demolición del edificio de Flex, donde se prevén 130 viviendas
El proyecto impulsado por Vía Célere incluye la ejecución de dos bloques de once plantas
El antiguo edificio de Flex, que durante décadas albergó la fábrica de colchones de esta marca en Málaga capital, empieza a decir adiós. La Gerencia de Urbanismo acaba de conceder la licencia de demolición del inmueble a la promotora Vía Célere, que proyecta la ejecución de dos edificios de viviendas en esta misma parcela. La destrucción de esta construcción es el paso previo necesario para que la firma pueda impulsar el nuevo proyecto residencial. De acuerdo con la documentación oficial, no se fija un plazo concreto para la realización de estas primeras actuaciones que, en cualquier caso, deberán afrontarse antes de seis meses. Sí se apunta el presupuesto de ejecución material de esta operación, que alcanza los 384.265 euros.
El vacío que dejará la demolición de la antigua Flex será ocupado por dos torres de once plantas cada una, con capacidad para 130 viviendas, que se asentarán sobre un zócalo comercial y una planta diáfana. A estas se sumarán cuatro bajo tierra, destinadas a aparcamientos y trasteros.
La cuestión de altura en este emplazamiento es clave. La iniciativa fue la primera de otras muchas que van a tener que adaptarse a las nuevas servidumbres del aeropuerto de Málaga que está tramitando Aviación Civil. En el caso de esta intervención, los promotores asumieron las sugerencias, rebajando las dimensiones en vertical. La propuesta original era la de dos edificios de 15 plantas. Ahora, la cota queda fijada en 57 metros.
De acuerdo con los parámetros del estudio de detalle aprobado de manera definitiva, de la edificabilidad completa asignada a la parcela, 15.884 metros cuadrados, algo más de 13.000 se destinan a uso residencial. El resto del techo se destina a comercial, con 1.476 metros; terciario, con otros 1.329 metros, y equipamiento, con 1.233 metros de techo.