Los hosteleros apremian a la inmunización de sus trabajadores y se ofrecen para ello
José María Rossell, presidente del Grupo Senator & Resorts, es rotundo: “Si, como se habla, hasta finales de septiembre no hay suficientes personas vacunadas para generar cierta inmunidad, perdemos otro verano. El país no se lo puede permitir y Andalucía menos”. El sector hotelero vive sumido en la incertidumbre, puesto que es uno de los gremios en que más impacto está teniendo la crisis sanitaria siendo, además, uno de los grandes olvidados por el Gobierno central, que sólo le ha brindado, hasta el momento, la oportunidad de acogerse a expedientes de regulación de empleo temporal (ERTE) para sus trabajadores y el acceso a créditos ICO, al igual que a cualquier empresa de otro sector.
A pesar de su importancia como componente esencial del sector turístico, las grandes empresas hoteleras están siendo relegadas, si bien ellas no cesan en su intento para evitar que se agrave aún más el problema y siguen proponiendo. En este sentido, el sector hotelero andaluz pide que incluya en algún grupo prioritario de vacunación a sus trabajadores, que por sus características laborales se encuentran en estrecho contacto con sus clientes, y esto se ejecute antes de verano. Los empresarios indican que esta acción podrían llevarla a cabo los servicios de prevención de riesgos laborales que cada establecimiento hotelero tenga contratado, para lo cual habría que dotarles de las vacunas necesarias. De esta manera se descargaría al SAS de tal obligación.
Rosell también aludió a la posibilidad de contar con test de antígenos para que se los hagan sus clientes antes del regreso, con la tranquilidad de que, en caso de ser positivo, la Junta de Andalucía dispone de un seguro que se haría cargo de su permanencia en la comunidad hasta su recuperación además del coste del viaje de retorno a su país.