Carlos Lamela: “Es ejemplo de la modernidad que llegaba a Málaga”
El hijo de Antonio Lamela, arquitecto y actual responsable del estudio que lleva este mismo apellido, pone en valor la importancia del edificio diseñado por su padre en los años
70. “Es uno de los ejemplos más importantes de la arquitectura contemporánea en la capital de la Costa del Sol; ejemplo claro de una modernidad que estaba llegando a la ciudad en los años sesenta del siglo pasado”, reconoce. Ensalza el hecho de que representó una arquitectura nueva, “fruto de la presencia de jóvenes arquitectos malagueños y otros ya reconocidos que desembarcaban en la ciudad provenientes de Madrid”. Este fue el caso de Antonio Lamela, que ya había construido obras en Torremolinos, como el Hotel Tres Carabelas, La Nogalera, Playamar… “Sus terrazas diáfanas y continuas, su basamento estructural con unos pilares escultóricos de hormigón armado muy bien construidos, pero sobre todo con una inteligentísima geometría de plantas giradas para buscar las mejores vistas y soleamiento”, destaca Carlos al reconocer la obra de su padre. Un gesto que, a su juicio, “fue la clave de esta singular obra arquitectónica”. “La macla funcional resultante es de gran talento, al aprovechar al máximo todas las grandes ventajas que ofrecía su excepcional ubicación”, insiste, subrayando el “interesantísimo portal”, complemento “perfecto” del edificio.