Limones visitó Gibraltar a espaldas del PSOE y contra el criterio de Laya
El senador quiebra el marco de Exteriores de considerar al Peñón parte ajena a la negociación sobre el futuro tratado
El senador socialista Antonio Gutiérrez Limones visitó el martes Gibraltar en contra del criterio del Ministerio de Asuntos Exteriores, que previamente le había indicado que su presencia sería inoportuna, y a espaldas de la dirección federal de su partido, a la que no comunicó sus intenciones.
La decisión de Gutiérrez Limones de hacer caso omiso al criterio de Exteriores ha provocado un profundo malestar en el departamento de Arancha González Laya. Desde comienzos de año, los responsables del ministerio trabajan con sumo cuidado en la negociación que, aún sin fecha, la Unión Europea debe iniciar con Reino Unido sobre las futuras relaciones de la colonia con los 27, tomando como base el preacuerdo del 31 de diciembre.
Según diversas fuentes consultadas, Exteriores considera básico que desde España se ofrezca una unidad de criterio y de acción, sin matices, y no crear falsas expectativas de futuro sobre un posible consenso. Pese a la voluntad de ambas partes para la creación de un “área de prosperidad compartida” entre el Peñón y el Campo de Gibraltar, existen aún grandes diferencias sobre la fórmula para su puesta en marcha.
El senador, que preside la Comisión de Exteriores en la Cámara Alta, se entrevistó con el ministro principal de la Roca, Fabián Picardo, en la sede del Gobierno llanito –en el nº 6 de Convent Place– en lo que Gutiérrez Limones denominó como una “visita de cortesía”, aunque las formas y el lugar fueron más bien la de una reunión oficial. A su término se produjo una comparecencia de prensa a la que no fue convocada la prensa española.
Gutiérrez Limones, que en esa comparecencia trató de separar su presencia en el Peñón de lo que denominó su “agenda oficial”, indicó que la negociación sobre el encaje de Gibraltar en la UE es competencia del Ministerio y que, por tanto, su misión era otra.
“Yo sólo estoy aquí como presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso y como parte del proceso para entender la verdad. Para aprender sobre Gibraltar y el Campo de Gibraltar, su situación actual y tomar esta situación para el desarrollo de mi trabajo”, manifestó.
Sin embargo, a tenor de lo publicado por el diario gibraltareño Panorama, Gutiérrez Limones se arrogó cierta representación de la posición española al ser preguntado sobre si su presencia en la Roca sugería que el Gobierno de Pedro Sánchez estaba dispuesto a escuchar a Gibraltar más allá de las relaciones bilaterales entre España y Reino Unido: “Mi presencia aquí lo dice todo”, contestó.
Estas manifestaciones contrastan con el objetivo del Ministerio de Exteriores de que el diálogo a nivel oficial, en esta fase clave en la que se trata de ajustar los términos del Gibrexit, sea única y exclusivamente con Reino Unido, no con el Peñón.
Un ejemplo reciente de que España no considera a Gibraltar como interlocutor vino de la reacción del Gobierno a la reunión que el 29 de marzo mantuvieron en Gibraltar el ministro británico Dominic Raab y Picardo, en la que ambos acordaron “un enfoque conjunto para las próximas negociaciones sobre el tratado entre la UE y el Reino Unido con respecto a Gibraltar”. España respondió subrayando una vez más que la interlocución será con el Reino Unido: “La visita [de Raab] se produce en el contexto de las actuales negociaciones entre la UE y el Reino Unido que se llevan a cabo a partir del principio de acuerdo alcanzado el 31 de diciembre”.
La prensa llanita apunta a una predisposición del Gobierno a atender a Picardo por su cuenta