Así es Alexia Rivas, la enemiga de Marta López
La periodista retoma la senda televisiva con su participación en ‘Supervivientes’
Del Merlos Place a Supervivientes. La vida de la periodista Alexia Rivas ha sido muy ajetreada en el último año. Prácticamente pasó del anonimato a protagonizar el triángulo amoroso más famoso de la cuarentena junto a Alfonso Merlos y Marta López, aquel que mantenía entretenido a toda España y Mediaset se encargó de rentabilizar hasta la extenuación.
Alexia Rivas, graduada en Periodismo en el año 2016 por la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, es natural de Ponferrada (León). Completó su formación con un curso de presentadora en la Universidad Villanueva en 2017. La llegada a la televisión, su gran pasión, no tardó en producirse. Tras pasar por la televisión autonómica de Castilla y León, La Sexta, Marca TV o Trece, fichó por La Fábrica de la Tele para convertirse en reportera de Socialité. El salto a la fama de Alexia Rivas, y el que le ha abierto la puerta de entrada a Super vivientes, tuvo lugar el 23 de abril del pasado año, en plena cuarentena. Una mujer en bikini se colaba de fondo en una entrevista por videollamada que estaba realizando Alfonso Merlos para el canal de Youtube Estado de alarma. Era Alexia Rivas, reportera del programa Socialité. Por aquel entonces, Merlos salía con Marta López, con quien compartía plató en Ya es mediodía. La infidelidad se hizo viral. Además, la madro de ansiedad, fruto de la exposición mediática. Una de las consecuencias del Merlos Place fue su salida de Socialité. La joven decidía abandonar el programa, al no estar conforme con el trato que estaba recibiendo por parte de su compañeros. En septiembre de 2020 finalizaba su relación con Merlos.
Fuera de la televisión, la periodista ha iniciado una trayectoria como modelo e inf luencer. Cuenta con más de 167.000 seguidores en Instagram y aprovecha su popularidad para publicitar todo tipo de marcas a través de su perfil. Es habitual ver fotos suyas con varios estilismos, haciendo sorteos y recomendando productos en sus publicaciones.
Ahora regresa a la televisión para embarcarse en la aventura de Super vivientes, donde tendrá a Marta López como compañera. En el hotel y antes de la convivencia en la isla, las protagonistas han tenido su primer rifirrafe. Alexia le contaba a Olga, mujer de Antonio David Flores, cómo fue su pase a la fama. La joven reconocía que lo pasó mal y tuvo que cuidar su salud. Marta escuchó la conversación y saltaron las primeras chispas. “La respeto, pero no comparto absolutamente nada de lo que ha dicho. Yo no salí corriendo cuando pasó un problema. Yo seguí trabajando. Has dicho que llevabas dos meses viviendo en casa de Alfonso, es mentira”, respondía Marta. nio de 73 años de la reina Isabel II y el duque de Edimburgo siempre estuvo bajo la sombra de la sospecha de la infidelidad y hay mucha literatura al respecto. Su unión huía de romanticismos, más bien se basó en el apoyo y la creencia mutua de que The Firm – La Firma, como se refiere la familia real británica a la institución– está por encima de todo, y lo que es más, de todos.
La entonces princesa Isabel tenía tan solo 13 años cuando conoció a su futuro esposo, el príncipe Felipe. Isabel era una niña que acompañaba a sus padres –el rey Jorge VI y la reina Isabel– y a su hermana más joven, Margarita, en uno de sus viajes a la Universidad Naval Real Británica en Dartmouth en 1939 Un cadete rubio de 18 años llamado Felipe fue instado a entretener a Isabel y Margarita. Fue muy poco antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial. La joven quedó completamente prendada de él, pese a que ella aún jugaba con muñecas sar, hay que dejar que sea de forma natural”. Y pasó. En 1947 acabaron casándose.
Isabel y Felipe son la pareja real que se ha mantenido casada por más tiempo en la historia del Reino Unido. La relación, dicen los historiadores, ha superado la prueba del tiempo fundamentalmente porque se amaban en verdad. De forma privada, ella siempre le trataba como el cabeza de familia. Tuvieron sus crisis, claro está, sobre todo por las infidelidades de él, y porque en ocasiones se sentía ninguneado y se aburría soberanamente en los actos protocolarios. Ella es fría y distante. Él, con carácter y metepatas. Dos caras de una misma moneda que se complementaron a la perfección.
Sus últimos días, según el Daily Mail, transcurrieron leyendo, hablando con sus hijos y familiares por videollamada y tomando el sol en Windsor. Quería despedirse del mundo desde allí. Junto a ‘su’ Lilibeth, y no en un frío hospital, donde pasó 28 días el mes pasado. Lo ha conseguido como hizo con todo: con tesón. Dios salve al duque de Edimburgo.