Políticas para no dejar ningún a barrio atrás
El estudio no pretende ser sólo un diagnóstico, sino aportar también herramientas para el tratamiento. “En la situación postCovid parece necesario el análisis del impacto de la pandemia en la distribución geográfica e intensidad de los indicadores de vulnerabilidad en los distintos barrios, así como la capacidad de resiliencia de cada barrio”, apunta el documento. Y agrega: “La intensidad de la vulnerabilidad de los barrios, así como su distribución geográfica tras la pandemia será sin duda una información necesaria para la implementación de políticas de recuperación inclusiva que tengan por objetivo no dejar a ningún barrio atrás”. También señala el avance de la investigación que
“las conclusiones derivadas de la evolución de la asociación entre la densidad de contagios y vulnerabilidad de los barrios pueden ser informativas a efectos de la activación de estrategias preventivas de gestión por parte de las administraciones involucradas”. El catedrático de Geografía Física de la Universidad de Málaga y uno de los participantes en la investigación, Damián Ruiz Sinoga, recuerda que durante el primer periodo de la pandemia, muchas familias de barrios desfavorecidos tenían serias dificultades para que los padres pudieran teletrabajar a la vez que los hijos estudiaban on line dado que no contaban con medios informáticos suficientes. “Había un ordenador para cuatro o cinco miembros de una misma familia”, recuerda Ruiz Sinoga. Y acota que, de cara a la recuperación postCovid, “ese es un déficit que hay que atender”. El avance de la investigación presentado en el Foro Transfiere tiene como antecedentes estudios previos de la UMA, el OMAU y la Fundación Ciedes. Estos ya habían señalado que en pre Covid, “a pesar de la buena dinámica económica del turismo y de la benignidad climática, la ciudad mostraba diferentes niveles de vulnerabilidad, ya fuese asistencial, socioeconómica, demográfica o territorial”