Primera nevada del año en la Sierra de las Nieves
Las previsiones apuntan a que pueda seguir nevando en la zona y que aumente su intensidad
Las cumbres del Parque Nacional Sierra de las Nieves amanecieron ayer cubiertas por la primera nevada de consideración del año. Ha tardado en llegar, pero este viernes la nieve cubre el espacio natural por encima de los 1.600 metros y alcanzó parte de los bosques de pinsapos que se encuentran situados entre el refugio de Los Quejigales y el puerto de Los Pilones.
Agentes de Medio Ambiente han realizado labores de control en las diferentes zonas que alcanzó la nieve y que suelen convertirse en punto de atracción para los visitantes.
Además, el manto blanco puede verse desde diferentes puntos de la provincia como Yunquera o zonas del Valle del Guadalhorce. Las previsiones apuntan a que pueda seguir nevando en la zona y que aumente de forma considerable su intensidad este fin de semana, para cuando la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) tiene previsto que siga lloviendo en la provincia de Málaga, con alerta por lluvias en la Serranía de Ronda para este sábado 9 de marzo y la cota de nieve bajando hasta 1.400 metros por la tarde.
Meteorología había anunciado para estos primeros días de marzo el episodio de lluvias más extenso de todo el invierno en la provincia. Las primeras precipitaciones llegaron este jueves por la tarde y dejaron algo más de 30 litros en municipios como Jubrique.
Fue el acumulado más elevado de la jornada, según los datos publicados por la red Hidrosur, entre los que también destacan los 23 litros de Cortes de la Frontera (Majada de las Lomas). Además, en Ronda cayeron 18 litros y en Torre del Mar unos 15. En cuanto a Málaga capital, un pequeño aguacero caído a primeras horas de la tarde dejaron 10 litros en el Paseo de la Farola.
En otros puntos, como el embalse de la Viñuela, al que la lluvia lleva siéndole esquiva desde hace ya demasiado tiempo también ha caído algo de agua, siquiera para romper esta tendencia: 13,6 litros. El embalse del Limonero recibió una cantidad pareja (13) y el pantano de la Concepción fue el que más sumó, con un aporte hídrico de 15,2 litros. Menos se registró en Guadalteba (7), Conde del Guadalhorce (7,5) y Casasola (6,9).
Meteorología tiene activado el aviso amarillo por fuertes lluvias
Si le preguntan a aquel niño que de pequeño en Buenos Aires pedía en cada cumpleaños, Navidad o Reyes un proyector o a aquel adolescente que salió del cine por primera vez de ver El Conformista, ni en sus mejores sueños se habría imaginado llegar hasta aquí. Marcelo Piñeyro, tras debutar en el cine por primera vez con Tango feroz en 1993, ha sido galardonado en el Festival de Málaga con el Premio Retrospectiva Málaga Hoy.
El director argentino se graduó en la Facultad de Bellas Artes en la Universidad Nacional de La Plata, su primera película fue Tango feroz y también ha dirigido largometrajes como Caballos salvajes, Cenizas del paraíso, Plata quemada, Kamchatka, El método, Las viudas de los jueves, el Ismael y El Reino. También ha recibido decenas de premios y reconocimientos a nivel mundial en varios festivales como San Sebastián, Sundance o Roma. Ha sido ganador de tres premios Goya y reconocido con el premio Sur de la Academia argentina.
El Premio Retrospectiva Málaga Hoy para él es algo que nunca habría podido imaginar. Además, explicó que este galardón le ha hecho revisar todo lo que ha hecho hasta ahora y siente que “todo lo que quería hacer en la vida es cine y lo he logrado”.
No sabe cuándo empezó a gustarle el cine, solo recuerda que desde pequeño siempre lo consumía. Con sus amigos o con su familia, él siempre estaba dispuesto a ir al cine a ver una película. Entre regalos de cumpleaños y Navidad relacionados con el cine, nunca llegó a considerar que esto podría llegar a ser su profesión. Siempre pensó que se quedaría en un pasatiempo.
Un día descubrió que en la Facultad de Bellas Artes se estudiaba Cine y se apuntó. También se anotó en Arquitectura, pero “no la llegué a empezar” porque su deseo siempre había sido otro. De entre todas las películas que ha visto, una de las que más ha reproducido es El Conformista, cuyo primer visionado marcó un antes y un después en su vida. “Cuando salí de verla dije mañana me voy a apuntar al cine”, confesó ayer Piñeyro en una entrevista con este periódico. Y así fue.
Por otro lado, el cineasta también ha dirigido adaptaciones de novelas y de obras de teatro: Plata quemada, El método y La viuda de los jueves. A su juicio “en una adaptación uno tiene que apropiarse y hacerlo desde su mirada”. En cuanto a su serie El Reino incidió en que fue “una experiencia fantástica” y tuvo una gran repercusión y una gran controversia.
Entre hacer películas o series, prefiere no elegir, pero remarcó que “son experiencias muy diferentes y las dos me fascinan”. Además, insistió en que de igual modo también considera que “las plataformas no van a matar las salas de cine, al igual que la tele no hizo desaparecer el cine, ni el cine al teatro. Todos pueden convivir”.
Desde su perspectiva, sí que
Marcelo Piñeyro
Director de cine
Las plataformas no van a matar las salas de cine, al igual que la tele no hizo desaparecer el cine”
existe una tendencia a fomentar “un relato homogeneizado, un solo modo de contar y habituar al espectador”. Por ello remarcó que “tenemos que seguir buscando nuevas formas de relato intentando no desconectar de la audiencia. Sin audiencia terminamos no teniendo mucho sentido y siendo irrelevantes”.
En relación a Plata quemada explicó que en la crítica de New York Times escribieron que “para encontrar una película que como Plata quemada reformulara el modo de relatar visualmente había que remontarse al Conformista”. Para él, este artículo le hizo sentir que “había un círculo que se cerraba”.
Después de décadas dedicadas al cine, a Marcelo todavía le queda mucho por ofrecer. Sigue trabajando y su siguiente proyecto quiere que sea un largometraje. “Estoy trabajando en un guion, más bien peleándome con él”, apuntó.
Al pensar en los jóvenes que sueñan con ser directores o directoras de cine algún día, señaló que deben creer en ellos mismos y en sus proyectos porque, pese a que “es complicado hacer una película, no hay que darse por vencido y no hay que transigir”.