Los embalses ganan el agua equivalente a dos meses de consumo en la capital
● Los pantanos recogen ocho hectómetros tras el temporal ● Meteorología espera que marzo sea “más lluvioso de lo normal”
La situación hídrica de los pantanos de la provincia de Málaga continúa marcada por los efectos de la sequía, si bien las lluvias de los últimos días han aliviado la situación, pero todavía es necesaria mucha más agua y no se puede bajar la guardia. Los embalses, que ahora vuelven a marcar números al alza, cuentan actualmente con 105 hectómetros cúbicos. En este tren de lluvias registrado desde el viernes, el más extenso del invierno, las precipitaciones han dejado en una semana ocho hectómetros –seis de ellos en apenas un día–. Si se tiene en cuenta que Málaga capital suele consumir una media de cinco al mes, la cantidad de agua recibida se correspondería con el gasto de casi dos meses.
La cifra, aunque es solo un equivalente a ese consumo, resulta significativa, dado que hay que recordar que, el pasado mes de noviembre, la concejala delegada del área de Sostenibilidad Medioambiental, Penélope Gómez, ya advirtió que a la capital solo le quedaba un año de suministro si en lo que restaba de año no llovía o si no se registraban las mismas precipitaciones que en 2022. Los pronósticos se cumplieron. A finales del ejercicio pasado, Málaga ya tuvo que actualizar sus restricciones para cumplir lo exigido por la Junta de Andalucía, un ahorro del 20%.
Los expertos llaman a la prudencia. No obstante, las precipitaciones han avivado la esperanza en plena sequía, que limita el consumo por habitante y día a 160 litros. Según los medidores de la red Hidrosur, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, en la última semana, los embalses han pasado de tener un acumulado de 97,97 a superar la esperada barrera de los 100.
Esas precipitaciones han llegado principalmente al de La Viñuela, que mientras hace siete días registraba un volumen de 13,11 hectómetros cúbicos de ahora alcanza los 15,21, lo que equivaldría a casi dos meses de consumo. Su llenado es del 9%. La Concepción, que nutre a 11 municipios de la Costa del Sol y que se encuentra al 30,55% de su capacidad, ha ganado la cantidad correspondiente a poco más de un mes. Actualmente dispone de 17,58 hectómetros cúbicos.
El embalse de Conde del Guadalhorce, al 13,62%, ha recibido también un aporte esta semana, pasando así de 12,71 hectómetros agua registrados el pasado domingo, a los 14,24 que Hidrosur reflejaba ayer. La cantidad acumulada en el pantano de Casasola, situado en el término municipal de Almogía y al 26,20%, se ha mantenido intacta, con 5,6 hectómetros. El del Guadalteba prácticamente no ha experimentado cambios, pasando de 31,13 a 31,35 hectómetros. Está al 20,48%.
En el otro extremo se encuentran los pantanos que han bajado su nivel de agua embalsada. Por fortuna, solo uno en la provincia de Málaga: el del Limonero, que actualmente está al 19,38% de su llenado. Tiene 4,33 hectómetros de agua.
La cantidad que se consume de los pantanos de la Costa del Sol se sitúa en dos hectómetros por metro cúbico, aunque la cifra varía en función del mes y también de las restricciones. Fuentes de la Mancomunidad
de Municipios de la Costa del Sol detallan que el gasto que se espera de cara a los próximos meses oscila entre 1 y 1,5 hectómetros.
La Junta de Andalucía comenzó a restringir el consumo de agua también en estas localidades el pasado 21 de febrero. Se redujo la presión del agua por las noches para ajustarse a las restricciones y ahorrar la mayor cantidad de agua posible. Las últimas medidas aplicadas por el comité de sequía afectan también a la ciudad de Málaga y el Valle del Guadalhorce. Se sumaban a las ya implantadas en la provincia para frenar la sequía desde hace meses. Más de una quincena de municipios tienen desde hace semanas cortes nocturnos de agua (hay municipios donde los cortes son de hasta 14 horas), otros han sufrido reducciones de presión (en horario nocturno).
Meteorología espera que el mes de marzo mantenga los niveles habituales, con precipitaciones habituales “o incluso más lluvioso” de lo que suele serlo habitualmente. Por el momento, no hay previsión de lluvia hasta el martes por la noche. La probabilidad de que vuelva a caer agua en la provincia a partir de las 12:00 del miércoles es de un 50%. El jueves saldrá, de nuevo, el sol. Y habrá que seguir mirando al cielo. Según el parte de la Aemet, las temperatuas máximas irán en aumento, hasta los 22 grados el viernes.