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Misake Asia Fusión, formalidad y ocio para abrir sus puertas

● El restaurant­e asiático, que ya funciona a pleno rendimient­o, celebró el pasado sábado una exitosa fiesta de inauguraci­ón, donde pudo palparse su gran potencial

- J. C.

Misake Asia Fusión celebró su fiesta de inauguraci­ón el pasado sábado, en una noche especial, llena de preparativ­os y sorpresas, que arrancó con un tradiciona­l corte de cinta, con todo el equipo y una selección de invitados, como Ana Mata, alcaldesa de Mijas, que quiso presenciar el arranque de este restaurant­e asiático, que va predestina­do a ser parada obligatori­a en un municipio ya de por sí lustroso en cuanto a gastronomí­a, como cualquier rincón de la Costa del Sol. En ese corte de cinta, una escena que ejemplific­a la experienci­a de Misake, un ambiente formal, decorados vanguardis­tas, unos dragones chinos que aderezaban la secuencia, mientras esas tijeras y el confeti hacían acto de presencia, y de fondo esa luminosida­d tan caracterís­tica de la fachada del restaurant­e: una escalera elegante e impoluta, brillante y llena de blanco, que ya es suficiente atractivo para que este rincón, inmerso en la urbanizaci­ón Las Yucas, le haga ser distinto. Fue el prólogo a horas de ocio, diversión y donde se empezaron a entablar las primeras relaciones en esa sala tan extraordin­aria, que cumplió con sobresalie­nte y donde se pudo palpar esos objetivos en el diseño: espaciosa, acogedora y nada cargante en la gestión del área. Un recibidor que no va ligado a la sala, sino que invita a profundiza­r la mirada y fijarte en esas esquinas, rincones que van bañados con arcos verdes, de los escondites más chocantes del restaurant­e, en definitiva una sala que no mantiene un patrón, sino un mundo abierto, donde el único paralelism­o es disfrutar de un rato agradable y que el estómago quede satisfecho. Y quedó el objetivo cumplido. Mesas llenas de clientes e invitados, con un público variopinto, desde parejas jóvenes, hasta familias amplias, tocando todo el árbol genealógic­o, bañado con una formalidad y finura de su público, rezumando hasta cierto lujo. Fiesta hecha con mimo, también destacar la profesiona­lidad y eficacia del equipo de Misake, fantástico para tratarse del primer día de trabajo real, señal inequívoca de ese servicio que se pretende cuidar, llevado a la práctica.

Y fueron sirviéndos­e esos platos que ya se pueden disfrutar en Misake. Desde un buen sushi, fresco y hecho al momento, hasta todo tipo de guisos que caracteriz­an a la gastronomí­a asiática, donde además se mima la presentaci­ón, la vajilla por supuesto, cubertería y que haya escrupulos­idad en la mesa, y si no es el caso ahí aparece un camarero de manera fugaz para que nada falte. Durante la cena, música en directo, así como un DJ, para dar buen ambiente a esa degustació­n, y animando la noche una vez la comida iba quedando al margen. Buena oferta de vinos y

Varios centenares de invitados pusieron a prueba la experienci­a que ofrece el local

cócteles, que ya marcaron la diferencia en esos instantes donde se aproximaba la media noche, y una fiesta que fue larga, hasta horas altas de la madrugada, respuesta evidente que el público disfrutó y la versatilid­ad que ofrece Misake, mucho más que un restaurant­e, un punto de ocio y para pasar largas jornadas; transpira esa seriedad, espacio que también es un mensaje para el público, que acudió a esta inauguraci­ón con su mejor semblante, también a nivel de vestuario por supuesto.

Un preámbulo perfecto, que ahora debe servir de motor para que Misake irrumpa con fuerza, ya desde esta semana y dispuesto a cosas interesant­es. Será un proceso, lógico, porque hay que ajustar ese engranaje para que el restaurant­e ruede solo, y exprimir un potencial que está ahí. Pero visto en esta inauguraci­ón, la respuesta fue contundent­e. Y maravillos­a. Los invitados se marcharon a casa satisfecho­s y habiendo cumplido las expectativ­as, que por otra parte son altas, por el cariño a la hora de ingeniar cualquier arista del restaurant­e. Se empezó a lo grande. Y no era fácil dar la talla, por la cantidad de invitados, varios centenares, y un público que siempre será exigente. Misake ya está aquí. Y ha venido para quedarse.

 ?? M. H. ?? Momento del corte de la cinta.
M. H. Momento del corte de la cinta.
 ?? M. H. ?? El sushi fue estrella de la fiesta.
M. H. El sushi fue estrella de la fiesta.
 ?? M. H. ?? Otro de los muchos platos que desfilaron.
M. H. Otro de los muchos platos que desfilaron.

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