Sobre la afición y el CD Málaga 1903

José María Arrabal se pronunció acerca de la situación del Málaga CF. “Lo seguimos con mucha atención todas las administraciones, pero las circunstancias son las que son y permiten poco margen de maniobra por parte de todos. Me tengo que quedar con la afición, que ha demostrado ser el gran pilar de esa institución, que es centenaria en sus diferentes formatos.

Los sentimientos trascienden a lo que son unas escrituras de propiedad. Todo el país está impresionado viendo esas asistencias semana tras semana. Esa es la base, la piedra angular de que vaya más allá de toda propiedad o cualquier hoja excel. Por lo tanto deseando que se reconduzca y veamos a medio plazo una salida que permita pensar en cotas mayores”, comentó en SER Málaga.

Cuando se le preguntó acerca de la creación reciente de un nuevo club en la capital que aspira a competir con el propio Málaga y que fundó el que fuera administrador concursal Daniel Pastor (el denominado CD Málaga 1903), Arrabal fue tajante: “Este es un país libre, allá cada uno con las iniciativas que decida tomar. No lo valoro porque forma parte del ejercicio de la libertad de empresa y de actuación. No tengo opinión sobre eso. Sí tengo una opinión sobre lo que significa una entidad como el Málaga CF. Un club de fútbol da igual el apellido que le pongas, es un patrimonio cultural y sentimental. Cuando hablamos de que el malaguismo va más allá de Málaga Club de Fútbol, Club Deportivo Málaga, Atlético Malagueño… Es un sentimiento que este año cumple 120 años y que hay que proteger. Hay que aprender de la historia, hay que proteger eso con uñas y dientes dentro de lo buenamente posible. Eso dice mucho de la madurez de una sociedad. Málaga ha tenido una progresión muy positiva en cuanto al sentimiento de sí misma. En este caso un club de fútbol es un gran baluarte de todo eso, así que intentar defenderlo con uñas y dientes, todo el mundo debe sentirse responsable y concernido por eso. La situación es compleja, lógicamente, y depende de más factores que la buena voluntad de los aficionados o los que sentimos ese escudo, pero insisto, este es un patrimonio que hay que proteger más allá de lo que suceda en el futuro”.